(Publicado en el Diario Avance Tabasco)
¡BIEN HECHO MAESTROS!
Y de verdad no es sólo por molestar, pero todo esto tiene un origen. Desde hace ya algún tiempo, el sindicalismo en el rubro de la educación, ha servido para fortalecer las riendas económicas de los profesores, no para solventar el grave problema de educación del país. En Tabasco por otra parte, se reconoce tan lucrativo el ser educador, que hasta 2 sindicatos existen para agremiar a todo aquél que quiera entrar en la tela corruptela, nepotismo, flojera, y cinismo, todo a la vez que se “enseña” a los niños. En realidad, creo que lo único que puede trasmitir toda esta bola de gañanes, es la falta de conocimiento y de herramientas que servirán a los educandos problemas de sus vidas a futuro, claro, que ellos estando bien, no tienen nada de que preocuparse.
Por otro lado, puede que, y sólo es una probabilidad que ojalá sea realizable, quienes reprobaron el exámen, no tendrán la oportunidad de enseñar a largo plazo. Aunque lo más justo sería que fueran azotados públicamente o algo así, además de la imposibilidad de enseñar algo, en ningún momento de la vida, en ningún lugar del planeta. ¡Ah, sí!, también el castigo de no volver a presentar este examen, ya que, igual y se aprenden una que otra respuesta con la que puedan mejorar su pobre mediocre y desempeño en esta prueba.
404 zafios obtuvieron una calificación de “no aceptable” y es que los profes serán buenos pa rebrobar y poner números inferiores a 6, pero a ellos no les gusta que se les califique con un número. Y con forme a esto, la sensible SEP, quien es el encargado de asignarle dígitos a los exámenes que presentan los maestros, solo dicen algo menos trivial que “promovido” o “no promovido”. No obstante, es sabido que la calificación que sacaron los maistros tabasqueños, fue algo menor que 30% de los aciertos… que, si no me enseñaron mal mis profesores, significaría, en cantidad como ellos solían evaluar, algo así entre 0 ó 1 ó 2 ó 3, ¿no?
Así que ya no molesten y dejen de preocuparse por simplemente cobrar, dejar de ir a trabajar o inmiscuirse en la política y mejor trabajen, enseñen, y sobre todo, edúquense.
De testigos.- En Oaxaca, lugar por excelencia donde los maestros no trabajan, ya empezó la guelaguetza, que había sido suspendida precisamente porque los educadores no sólo no chambearon, sino que se ponían violentos a nivel social. Y aún con los constantes problemas del sindicato y de la falta de apetito de trabajo de los profesores, sacaron mejor calificación en la mentada prueba, que los profesores tabasqueños…
Fecha: 26/07/2011
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