jueves, 18 de febrero de 2010

Opinión: Francisco Peralta Burelo /Feb 18

Francisco Peralta
(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)

Hay que cuidar las instituciones

El que la UJAT fuera parte del proceso de designación de los nuevos consejeros electorales implicó más riesgos que beneficios (o distinciones) para el Alma Máter de los tabasqueños, porque de tal suerte se involucró en un evento que por propia naturaleza es cuestionable y controversial.


Este nombramiento, con tantos intereses políticos y personales de por medio, y con el descrédito que siempre ha cargado, porque nadie cree en su proceso, ya que siempre se ha realizado con cartas marcadas, nada bueno podrá traer para ninguna institución acreditada.

La Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT) debió haberse mantenido al margen de ese proceso. Nada tuvo que hacer allí --ni siquiera como mera aplicadora de exámenes de conocimiento a aspirantes--. Esos son terrenos que ni le incumben ni puede legitimar (porque bien sabido es cómo se dirimen las consejerías).

» INVOLUCRAN AL TSJ

En el proceso electoral del pasado mes de octubre el Tribunal Superior de Justicia del Estado no debió haberse visto involucrado en nada. Sin embargo, lo fue (y quien lo involucró sí, se dirá, “porque la ley le otorga facultades” para resolver sobre ese tema, fue un grupo de regidores encabezados por priístas).

Allí su pleno tuvo que dirimir una acción de revisión municipal en contra del presidente municipal con licencia de Jalpa de Méndez que más adelante fue revocada por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

El TSJ de Tabasco no debió inmiscuirse en este asunto político-electoral contencioso. Eso ya lo ponía en entredicho por sí mismo, dado que lo metía de lleno en una fase del proceso comicial tabasqueño.

Más afectó la imagen de esta institución el hecho de que el fallo de su pleno hubiese sido revocado por el TEPJF.

» SE REPITIO CON LA UJAT

Allí no se cuidó a una institución, como el Tribunal Superior de Justicia, que debió haberse mantenido al margen de las contiendas electorales.

Ahora se hizo algo semejante con la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, que lo mismo que aquél no debió involucrarse en asuntos cuestionables.

Ojalá y cosas como estas dos ya no vuelvan a repetirse en el estado y que se cuide más a este tipo de instituciones, no involucrándolas ni con elecciones ni con política partidista.

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