Sólo en domingo: Francisco Peralta Burelo / Jun 06

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(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)

Así nacimos… y así “semos” los mexicanos

fcoperalta42@hotmail.com

¿De casualidad, lector, lectora, no ha caído en manos suyas el libro “Ya no quiero ser mexicano”, de Mauricio Bares?. Si he de ser sincero con usted o usted tendré que decir que yo no he visto esa obra en ninguna librería o estante y que por lo tanto no la he leído, aunque eso, sí, tengo algunas referencias de ella.

O una sola referencia: un texto publicado en La Jornada hace ya casi dos años y que por esos azares de la vida conservo aún junto con otros recortes periodísticos que fui guardando para lo que pudiera ofrecerse más adelante. Es de una reseña bibliográfica de Arturo Cruz Bárcenas (de la que en su momento tomé algunos datos para esta columna dominical, sobre todo en lo tocante al mexicano “patriotero y llorón” que, según el autor, han creado el estado y la televisión).

Pues en ese libro –de acuerdo a la reseña de Arturo Cruz Bárcenas—Mauricio Bares dice muchas verdades sobre la manera de ser del mexicano. O, por decirlo de otra forma, lo disecciona, desmenuza y pone en su lugar (aunque quizá exagere un poquito, porque lo ve dependiente de su mamá, identificado por la comida picante, familiarizado con la idea de la tragedia, todavía con alma de esclavo y, como si ello no fuera más que suficiente, fatalista; válgame Dios).

Entrevistado por Cruz Bárcenas, Mauricio Barnés comenta que “desde niño decidió no ser así” (lo que seguramente lo llevó a titular su libro “Ya no quiero ser mexicano”). Este “abomina” septiembre, “mes de la patria”, y está en desacuerdo con los estereotipos que se le han endilgado. Tampoco concuerda con que –como en los culebrones cinematográficos—se la pase de borrachera en borrachera y de cantina en cantina, “como si su vida fuera un corrido o una típica canción ranchera” y tuviera que terminar siempre en tragedia”.

El personaje de Mauricio Bares –según la reseña de Cruz Bárcenas-. “sale del país y cuestiona todas estas nociones de mexicanidad”. “Si los mexicanos creen que serlo es ponerse a llorar y terminar en la cantina y acabar las borracheras con José Alfredo Jiménez no estoy de acuerdo”, le dice al reportero de la Jornada.

Habrá que deducir que por eso Mauricio Bares “ya no quiere ser mexicano”. O al menos de mexicancurios, al que la televisión y el cine nacional le han sacado tanto jugo y del que el gobierno –según sostiene él se ha aprovechado para hacerlo conformista y a nadie culpar más que “a su mala suerte” y “al destino” de que se lo lleve la tostada y le vaya mal; de que la mujer amada lo traicione; de que los amigos le den la puñada por la espalda; de que sea “probe”.

“Fuimos un país de esclavos, una colonia y a los que tenían ese poder les convenía que los indios fueran dóciles .. desde entonces la gran mayoría sigue pobre y lo siguen achacando a cuestiones del destino o de la naturaleza, con lo que no estoy de acuerdo”, riposta Mauricio.

Y sigue diciendo cosas el que ya no quiere ser mexicano. “Hay una enseñanza para hacernos chillones, cobardes, valentones cuando no es importante… cualquiera cree que aganarse a machetazos es un acto de hombría”, entre otras. Comenta la experiencia que tuvo “con un montón de mexicanos en el extranjero, que las dos semanas estaban llorando por el clima, porque no tenían a su mamá ni a su taquitos”.

¿Qué le parece todo esto lector, lectora?. Mauricio Barnés le pega al meritito clavo. ¿O no es así?. Acusa a la televisión de haber hecho “una caricatura grotesca” de la mexicanidad. Está en contra de esa idea de un mexicano “llorando en el rincón de una cantina, jurando vengarse y queriendo matarse”. “A mí –dice- me han dejado y yo no he querido matarme ni me he vestido de charro”.

Por eso –según expresa en la entrevista- él se queda con Chava Flores y sus canciones y trae a cuenta aquello de “ya llegaron los gorrones…” “Ese, dentro de lo suyo, fue un poco más crítico”, afirma. Habla de los que salen a las calles enrollados en banderas, con sombreros de charro, con sarapes con trompetillas, lanzando vivas a México – ah, aunque esto no lo indica, a la selección nacional de futbol--, que “son los más nacionalistas, los mas patrioteros”. A cuántos de esos no veremos ahora en Sudáfrica, lector, lectora, o en el Ángel de la Independencia (Esto si el “tri” gana juegos en el mundial).

¿Y usted lector, lectora, ya no quiere ser mexicano?. Bueno, de esos del estereotipo, según dijera en la entrevista –y dice en su libro--, Mauricio Bares?. ¿O quiere seguirlo siendo?. Pues así nacimos y así “semos”, podría afirmar alguien; así nos hizo Dios (o la televisión y el cine).

Lamentablemente se terminó el espacio, y pues hasta aquí queda. Ah, el teléfono de Mauricio Bares, por si desea adquirir su libro, es el 04455-2955-9836 (o al menos ése era hace dos años).