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(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)
Las mezquindades
jaclop62@hotmail.com
Hace algunos días el Ojo Visor, que en todo está, trató dos asuntos que consideró de importancia en ese momento, el primero de ellos, fue la evidente destitución de Juan Jacobo Pérez Cornelio, como delegado en Tabasco del Instituto Nacional de Migración, por violaciones a los derechos humanos de varios Centroamericanos migrantes a quienes elementos de esa delegación detuvieron utilizando macanas eléctricas, y el segundo asunto, fue la evidente desorganización del evento del 41 aniversario luctuoso de Carlos Alberto Madrazo Becerra, al que no asistió su hijo Roberto Madrazo Pintado, ni su nieto, Federico Madrazo Rojas, que bien se podía traducir en malos entendidos o desprecio hacia el principal organizador, el diputado plurinominal, Alfonso Izquierdo Bustamante.
En el caso de Juan Jacobo Pérez Cornelio se cumplió a cabalidad la premisa dada por el Ojo Visor, que en todo está, de que sería destituido de su cargo para ser investigado por las autoridades federales ante la flagrante violación a los derechos humanos de los Centroamericanos, asunto que también fue denunciado en la tribuna del Senado de la República, aprobándose un punto de acuerdo para que esta violación fuera investigada con todo rigor por las autoridades competentes hasta sus últimas consecuencias. Obviamente la información fue retomada por otros medios de comunicación del estado porque lo consideraron un tema relevante.
Por primera vez en la historia de la delegación del Instituto Nacional de Migración de Tabasco, se destituyó al que era delegado, Juan Jacobo Pérez Cornelio y a quien fungía como subdelegado, José Luis Gallegos Izquierdo, quienes no están libres de cien azotes, porque todavía no se determina la situación jurídica de ambos, ya que está plenamente comprobado por un visitador de la Comisión Nacional de Derechos Humanos que estuvo en la comunidad El Santuario perteneciente al municipio de Macuspana, que elementos del INM utilizaron macanas eléctricas para detener a los migrantes, pero además violaron un recinto religioso hasta donde se metieron para sacar a los Centroamericanos, varios de los cuales lograron escapar.
En concreto, el cese, destitución, sustitución o como se le quiera llamar, tanto de Juan Jacobo Pérez Cornelio como de José Luis Gallegos Izquierdo, es un asunto netamente jurídico que tiene que ver con la manera negligente con que actuaron y permitieron a los agentes a su cargo cometer una brutal violación de los derechos humanos de los centroamericanos y por lo tanto, ellos y únicamente ellos son responsables de sus actos.
En el caso del evento del 41 aniversario luctuoso de Carlos Alberto Madrazo Becerra, el Ciclón del Sureste, fue evidente la desorganización del presidente de la fundación que lleva el nombre del ex-gobernador, el diputado plurinominal, Alfonso izquierdo Bustamante, porque ni Roberto Madrazo, ni Federico Madrazo llegaron al evento, pero además había anunciado con bombo y platillo de que el orador oficial sería el gobernador de Colima, pero éste lo dejó colgado de la brocha por lo que tuvo que improvisar a un imberbe chamaco de la política que disparó para todos lados, que no dejó títere con cabeza, porque a todos se los tumbó, pero no tuvo la culpa, Héctor Hidalgo de decir barbaridades, sino de quien improvisó, pero su brutal novatez política, lo llevó a decir barbaridades, cuando debió ser un evento bien organizado para también arropar a quien gobierna Tabasco.
En éste último caso, se ha anunciado que la fundación “Carlos Alberto Madrazo” desaparecerá porque no hay recursos económicos para su sostenimiento, aunque en el fondo la desobediencia, el sentirse autónomo y morder la mano que dio de comer, también tiene su precio, de allí que no es gratis la desaparición de dicha fundación, cuyo presidente es el diputado plurinominal, Alfonso Izquierdo Bustamante.
En ambos casos señalados con precisión por el Ojo Visor, que en todo está, los actores principales, lejos de buscar la retroalimentación, lejos de expiar con valentía el Mea Culpa, lejos de aceptar su responsabilidad, han preferido buscar al o los responsables en otra parte y para ello han optado por señalar con índice de fuego a quien creen que es su “villano favorito”, ¿a quién creen ustedes mis estimados lectores que tanto Alfonso Izquierdo como Juan Jacobo Pérez están señalando de mandarlos a golpear, periodísticamente hablando?.
En días pasados, Juan Jacobo Pérez Cornelio tuvo la osadía de decirle a un amigo que el responsable directo de que los medios de comunicación lo estuvieran “golpeando” era por encargo del secretario de Gobierno, Humberto Mayans Canabal, que él y nadie más que él, era el interesado que dejara su cargo y se fuera del estado, quien sabe porqué lo diría el ex-delegado del INM, pero lo cierto, es que no creemos que el secretario de Gobierno, haya mandado a los agentes de dicho instituto a portar macanas eléctricas para agredir a los migrantes, pero como ahora el deporte favorito es culpar a Humberto de todo lo malo que pasa en el estado, pues lo acusan de todo, claro, sin fundamentos.
Pero eso no fue todo, porque en el caso del legislador plurinominal, Alfonso Izquierdo Bustamante, hasta mandó un propio al Ojo Visor, para cuestionarlo y supuestamente le llevara el mensaje al secretario de Gobierno de que dejará de “golpearlo” periodísticamente, de que él (Alfonso) ya sabía de dónde venían los señalamientos periodísticos en su contra; claro la respuesta al enviado del legislador fue tajante: el Ojo Visor, no escribe por consigna, ni por encargo, porque no está castrado mentalmente y tiene sus propias fuentes de información y que en el caso del secretario de Gobierno, Humberto Mayans Canabal, a quien por cierto tiene algún tiempo que no saluda, jamás le ha sugerido, en cargado, pedido u ordenado, escribir en contra o atacar a algún funcionario público o político de ningún partido político, porque independientemente de que el Ojo Visor, que en todo está, reconoce dos valores fundamentales: la amistad y la lealtad: siempre tendrá un compromiso supremo con la verdad, ya que aún y con la amistad, siempre criticará constructivamente, aún, a los amigos, porque a los amigos se les hiere con la verdad y no con la mentira, el elogio ruin o la adulación que transforma, porque en este duro oficio del periodismo hemos actuado con profesionalismo, siguiendo las normas de conductas inculcadas desde la infancia, y hemos hecho críticas de frente a los hombres del poder, a los hombres que están en el gobierno, no por pedido, consignas o por encargo, sino lo hemos hecho basado en nuestras convicciones, por eso, señalamientos mezquinos como el de Juan Jacobo Pérez Cornelio y del diputado, Alfonso Izquierdo Bustamante, no tienen sustento, ni razón de ser, porque, Humberto Mayans que es amigo del Ojo Visor, no le ha sugerido, pedido o indicado, que se escriba por consigna en contra de alguien; Mayans es un profesional de la política, que le está sirviendo eficazmente al gobernador Andrés Granier, de tal suerte, que tampoco se ha tenido a responder los señalamientos mezquinos vertidos en su contra, ni se ha defendido de los ataques viscerales que lo culpan de todos los males que se desatan en la entidad, porque entiende que tiene cosas más importantes que requieren de su atención en la secretaría de Gobierno, que estar contestando ataques sin fundamento, aunque llegará el momento que requerirá aclarar paradas, porque una mentira dicha mil veces a la ciudadanía, sin que haya un desmentido, es tomada finalmente como verdad.
La verdad, que comentarios de esa naturaleza, vertidos por el ex-delegado del instituto Nacional de Migración, Juan Jacobo Pérez Cornelio y por el legislador plurinominal, Alfonso Izquierdo Bustamante, son mezquinos por su misma naturaleza, carentes de toda razón, porque ellos sí demuestran su fobia hacia Humberto Mayans Canabal. Ahí queda.
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