(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)
Unidad y amistad
Juzguemos en dos palabras si un
príncipe debe fomentar facciones
contra él mismo o si debe ganar la
amistad de sus súbditos.
Federico II / El antimaquiavelo
erwinmacario@hotmail.com
Dos sucesos mueven a reflexión estas horas: el gran evento que fue la XXVI sesión ordinaria del Consejo Político Estatal del PRI y el conflicto en el Colegio de Bachilleres.
En ambos en relación al poder y la amistad.
Dice Federico II en su obra El Antimaquiavelo, corregida por Voltaire —que forma parte del libro Nicolás Maquiavelo El Príncipe, comentado por Napoleón Bonaparte, impreso en España, en 1971, por Juan B. Bergua—, que “Hierón (de Siracusa) se deshizo de sus amigos y de sus soldados, que le habían ayudado a la ejecución de sus designios; se alió a nuevas amistades, y se levantó otras tropas. Yo sostengo, a despecho de Maquiavelo y de los ingratos, que la política de Hierón es muy mala, y que hay mucha más prudencia en el hecho de fiarse de tropas de las cuales se ha experimentado el valor, y amigos de los que se ha puesto a prueba la fidelidad, que en desconocidos de los cuales no se está seguro”.
Tales conceptos y el epígrafe de éste día son válidos, estas horas, en Tabasco.
Con Federico II hay que aceptar que en la política no hay que “forjar monstruos para combatirlos, el hacerse enemigos para vencerlos; es más natural, más razonable, más humano hacerse amigos. ¡Felices son los príncipes que conocen las dulzuras de la amistad! ¡Y más felices aun aquellos que merecen el amor y el afecto de sus pueblos!
En el PRI, el sábado, se practicó con el ejemplo. Un gran evento reconocer a quienes le han dado fuerza, sus militantes. Un gran trabajo de comunicación política el video presentado, que reunió parte de las voces, de los que han sido no sólo militantes sino amigos en ese partido, algunos hechos “enemigos para vencerlos”.
La más generosa en ese evento fue la militancia: un aplauso unánime brindado a Víctor Manuel Barceló Rodríguez fue la señal, el signo de los nuevos tiempos en ese partido. No era ya el ex gobernador un “enemigo a vencer” como muchos otros que debieran entender el mensaje, sino el viejo amigo cuya fidelidad ha estado a prueba y que, con sus palabras en el video comprobó lo que puede hacer la suma de voluntades en las nuevas tareas de un PRI obligado a salvar este país, como coincidieron el gobernador Andrés Granier Melo y el presidente del Comité Directivo Estatal de ese partido político, Adrián Hernández Balboa, en sendos discursos del acto partidista.
No fue sólo la voz —y la presencia— de Barceló la suma de ese día. Otros actores, ex presidentes del partido y ex gobernadores, fortalecieron la unidad de un acto que es el parteaguas para lo que viene en el 2012.
El PRI en Tabasco, desde hacía más de 20 años, se había convertido en una fortaleza, en una ciudadela, tan necesarias en los tiempos de Maquiavelo para mantener la fidelidad y evitar las traiciones. Con Federico II debemos preguntarnos si éstas son necesarias o deben demolerse.
Se entiende que el PRI ha optado por sumar, por buscar la unidad que se pregona desde el propio liderazgo de un priísta como Granier . La sedición política partidista y la revuelta de los tiempos de El Príncipe, la turbación y la guerra en su contra, el espíritu inquieto de otros tiempos, deben desaparecer para que el PRI retome el poder en México.
Esa es la lección del sábado. Lo que se mostrará en el 2012 a un partido, el PAN, que surgió para destruir a la Revolución, como bien dijo Barceló.
Las condiciones tienen que darse. Los políticos de Tabasco tienen que cansarse ya de destruirse entre ellos, hacerse más razonables, meter el espíritu de inquietud y de revuelta “en un rincón tranquilo”, como se desprende del texto de Federico II. Combatir en lo posible lo malo de Maquiavelo.
¿Y que tiene que ver el Colegio de Bachilleres en todo esto.
Nunca como ahora en un sector del propio sistema político está a prueba la amistad y la unidad. Jorge Abdó Francis, es sólo un ejemplo de lo que puede pasar si la unidad no permea en todos los ámbitos del quehacer público. No basta, tolerar las ingratitudes, las traiciones que se disfrazaron en fidelidad o lealtad de otros tiempos a quien, como director del Colegio de Bachilleres, es la muestra de lo que, a otro nivel, sucede a “los príncipes”.
¿Dónde están a estas horas los amigos de otros tiempo del PRI? ¿Dónde los que eran amigos de Jorge Abdó?
Es tiempo de reflexionar. Todos los políticos son Abdó.
LADO CLARO
El PRI ha empezado a caminar hacia el 2012. No se necesitan fortalezas, ciudadelas para contener fidelidades. Que cada quien sume su voluntad. Es por Tabasco. Por México.
*Periodista. Premios: Radio Chapultepec, Club Primera Plana (35 y 40 años), Premio México de Periodismo, el Premio Estatal 1991 y el Rumbo Nuevo 2010. Ha publicado Periodismo y utopía, Vocabulario tabasqueño (en colectivo) y el prólogo de La última ruta de Cuauhtémoc, de Humberto Muñoz Ortiz www.erwinmacario.blogspot.com
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