Ciudad de México. El Presidente Felipe Calderón Hinojosa aseguró que en la tragedia del temblor de 1985, despertó el México que nos hace falta, el de la solidaridad, unidad y trabajo colectivo para superar los retos que ha enfrentado el país; pero también, dijo, del México que no se arredró ante la adversidad y encuentra el camino para salir adelante.
“Frente a los desastres naturales, como los que se están viviendo en estos momentos en diversos puntos de la geografía nacional, los mexicanos hemos sabido siempre cerrar filas como el gran pueblo que somos, y hemos dado una respuesta unida y eficaz.
“Esa es la fuerza que nos mueve a tender la mano a quienes sufren una emergencia, y la fuerza que nos impulsa a hacer de la prevención una tarea de todos. Esa, también, debe ser la fuerza que nos mueva para hacer frente, unidos, a todos nuestros desafíos", expresó.
En la conmemoración del Día Nacional de Protección Civil, acompañado de su esposa Margarita Zavala, el Titular del Ejecutivo Federal destacó que el temblor de hace 25 años dejó dos lecciones importantes: una, que la unión de los mecano permite superar cualquier adversidad; y, dos, que es necesario un sistema eficaz de Protección Civil, con base en una cultura de prevención y autoprotección ante desastres naturales.
Al respecto, el Mandatario enfatizó que el dinero y trabajo que se invierta en protección civil serán vidas que salvar mañana.
“En ello estamos comprometidos. En ello trabajamos, especialmente en el Plan Nacional de Preparación y Respuesta ante Sismos de Grandes Magnitudes en México. Aquí, el reto es articular una estrategia que nos permita aprovechar todos los recursos y las capacidades del Estado para salvaguardar la integridad física de los mexicanos”, subrayó.
En el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el Presidente Calderón hizo un llamado a rectificar la manera en la que usamos los recursos naturales.
“Es cierto. Fenómenos naturales como los sismos son inevitables, los propios huracanes son inevitables, pero lo que sí podemos evitar o minimizar es la pérdida de vidas humanas; lo que sí podemos evitar y minimizar son los cuantiosos daños materiales que empobrecen a miles, y en el mundo, a millones de familias.
“Para lograrlo, necesitamos, por un lado, una cultura de responsabilidad con la naturaleza, pero por el otro, mucho mejores sistemas de protección y avanzar hacia una nueva cultura de prevención y de autoprotección”, señaló.
El Presidente Calderón, además, entregó a la Cruz Roja Mexicana el Premio Nacional de Protección Civil, y al Patronato del Cuerpo de Bomberos y Rescatistas Voluntarios de Cabo San Lucas el Premio de Prevención 2010.
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