(Publicado en el Diario El Heraldo de Tabasco)
Juan_ochoa45@hotmail.com
La pesadilla apenas comienza
¿Para qué servirá la famosa Compuerta de Macayo? ¿Es verídica la afirmación de que protegerá a Villahermosa de inundaciones futuras y que con ella se perjudica a la Chontalpa? Son preguntas que le hicimos hace poco más de dos semanas a Armando Padilla Herrera, quien era delegado de Conagua hasta que de manera intempestiva dejó de serlo en el punto más álgido de la inundación de 2007.
Ese día, el ex perredista hoy panista ofreció una conferencia sobre el tema, en la Casa de la Cultura de Cunduacán, organizada por Rafael Torres Márquez. Entre el auditorio se encontraban diversos actores políticos, como el notario público y ex alcalde Heberto Taracena y la ex diputada local perredista Nidia Naranjo Cobián.
Padilla respondió que la obra hidráulica que con un marcado (y sospechoso) atraso se edifica en el punto donde el río Carrizal se desprende del Samaria, fue diseñada por expertos del Instituto de Ingeniería de la UNAM para regular y frenar la fuerza del cauce que va con dirección a la capital del estado; pero no, como muchos piensan, para desviar aguas.
La idea es, sí, que entre 60 y 70 por ciento del agua corra por el Samaria en tanto que el resto se canaliza por el Carrizal rumbo a Villahermosa, para sumarse al Grijalva en la zona de Acachapan. Los técnicos creen que al regular la fuerza del agua se frenará la erosión de lo que ellos llaman barrotes; o sea las márgenes del río, y consecuentemente los muros de protección levantados para proteger a zonas bajas.
Padilla presentó un estudio que muestra cómo ya se tenía contemplado que este año se tendrían precipitaciones inusuales sobre territorio chiapaneco y tabasqueño, contrariamente a lo que ahora dicen las autoridades federales.
Esa investigación, basada en modelos matemáticos, establece que en el transcurso de esta década continuarán creciendo de intensidad dichas precipitaciones, hasta alcanzar su pico hacia el año 2020, para luego disminuir de manera gradual y regularizarse alrededor de 2030.
El ex funcionario federal –a quien el gobierno estatal acusó de no haber informado oportunamente la gravedad de la crisis de 2007- opina que la Compuerta de Macayo tal como está, así como los muros de protección alrededor de Villahermosa, no serán suficientes para impedir que se repita una gran inundación en octubre, si es que se cumplen los pronósticos en cuanto a que lloverá entre 25 y 40 por ciento más de lo normal para ese mes.
Coincide con otras opiniones con referencia a que además del dragado de la bocana de Frontera y de ríos como el Samaria, urgen obras para desalojar aguas del Mezcalapa a través del Tonalá y del sistema de drenes del Plan Chontalpa, el cual se encuentra mayormente inservible porque apenas si se dragó parcialmente en los últimos años.
En conclusión, preparémonos, ciertamente, para lo peor. Con estas fechas patrias arranca la temporada histórica de crecientes. Aun cuando no nos toquen coletazos de huracanes, la situación puede ponerse muy crítica. A mitad del Atlántico, en las pasadas 48 horas, se formó un monstruo meteorológico llamado Igor, que el lunes pasó de tener categoría uno a cuatro.
El Centro Nacional de Huracanes define a Igor como sumamente poderoso. Todavía no se sabe si entrará al Caribe y si afectará a Centroamérica y a México, o si tomará camino hacia el norte. Lo sabremos, quizá, dentro de una semana, o diez días. Ya se anticipa que pronto alcanzará la categoría cinco. Pero detrás suyo viene otra amenaza: Julia, que por el momento es sólo tormenta tropical.
A este paso, sin la intención de ser pesimistas o ave de mal agüero, debemos decirle al lector que la gente que ahora está en el agua en territorio tabasqueño, seguirá ahí mismo durante mes y medio, por lo menos, en tanto que se fortalece la expectativa de que se vuelvan a inundar el centro y norte de Villahermosa.
De los apuntes
Y vámonos de puente. ¡Qué vergüenza! Por eso el país está como está. Gran parte de la burocracia, incluido nuestro paupérrimo sector educativo, se echarán de panza (o de nachas) durante miércoles, jueves y viernes, dizque para celebrar el bicentenario. ¿Qué acaso no sería lo correcto celebrarlo, al igual que el Día del Trabajo, trabajando el doble o triple?***** ¿Y dónde andan los suspirantes por la gubernatura? Así como son muy duchos para hacer reuniones de grilla, es la hora en que ciento treinta y tantos mil damnificados quisieran verlos en campaña, sí, pero para recolectar despensas, medicamentos, ropa y otros auxilios en especie, e incluso en efectivo, para aquellos a quienes quieren convencer de que son buena gente y que merecen el voto. El mensaje va por igual para legisladores y funcionarios públicos***** “Ya estuvo que te quedaste el resto del sexenio como secretario técnico del Consejo Para la Reconstrucción de Tabasco”, le dijimos a Pedro Javier Reséndez. Empero, nos aclaró que él ya no realiza esa función, desde que dejó de ser coordinador General de Asesores, en virtud de que en la normatividad interna del propio organismo ciudadano se establece que esa labor corresponde a un funcionario estatal. Y él, dice, ya no lo es. Reséndez anda buscando, desde hace buen rato, la oportunidad de que lo dejen hacer política. Desde enero de este año ya andaba queriendo renunciar al cargo, decepcionado porque el PRI no lo consideró como prospecto para un puesto de elección popular***** Tiene toda la razón Chucho Alí cuando advierte que hoy más que nunca nuestra ciudad debe mantenerse limpia, y que los ciudadanos debemos tomar conciencia y responsabilidad de los daños que causamos al tirar basura.
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