viernes, 10 de septiembre de 2010

Doble Filo: Homero T. Calderón / Sep 10

(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)

Otro niño héroe se lanzó al vacío

Recuerdo entre la bruma del tiempo un poema de Vallejo sobre Pedro Rojas, un hombre de la República: "Lo han matado suavemente/ entre el cabello de su mujer, la Juana Vázquez,/ a la hora del fuego, al año del balazo/ y cuando andaba cerca ya de todo.// Pedro Rojas, así, después de muerto,/ se levantó, besó su catafalco ensangrentado/ lloró por España/ y volvió a escribir con el dedo en el aire:/ ¡Viban (está mal escrito a propósito, señor Maldonado) los compañeros! Pedro Rojas./ Su cadáver estaba lleno de mundo"//… Esto lo cito porque recientemente un nuevo niño héroe se tiró desde el macizo más alto de la presa de Malpaso, envuelto en la bandera tricolor. Se llama Estéfano Conde y es comunicador social de la CFE. Antes de su doloroso sacrificio convenció a un nutrido auditorio conformado mayormente por periodistas, que "debemos resignarnos (los tabasqueños) a ser inundados o nos lleva la tiznada".

Tan emocionada arenga provocó que algunos sacaran su pañuelito y enjugaran dos que tres lágrimas y una ilimitada catarata de mocos. Estéfano, al más puro estilo de aquella veterana actriz, doña Prudencia Griffel, transmitió el más profundo dolor que sienten sus jefes Felipe Calderón y Elías Ayub.

Si por ellos fuera nunca se usarían ya las malditas presas de Chiapas y los tabasqueños podrían hacer hasta una vida normal. Podrían incluso, con esa inventiva que sólo tenemos aquí, armar una industria muy prometedora con el principal bien material que tenemos (el agua), embolsándola en atractivas bolsitas de "bolis".

Pero la nación apela al sentimiento y responsabilidad de todo tabasqueño en edad de pensar: "déjense inundar para que la República sobreviva". 106 millones de mexicanos aquilatarán, según la idea de don Estéfano, el sacrificio de estar hasta el culo de agua. Y la nación, en franca crisis por la pendejez republicana, allegará a su pequeña caja de caudales, esos pequeños dineros de la venta de electricidad, ya pactados con naciones fuera de nuestra frontera.

(Si no fuera por eso)… Un sollozo generalizado remató las últimas palabras del comunicador de origen etrusco: "Porca miseria! ¡Porco destino de la mía nova patria! Subió paso a paso la empinada escalera que lleva a la cortina más alta de Malpaso (¿o Peñitas?), se lió alrededor una bandera tricolor y se lanzó al vacío. Los comunicadores, que unos minutos antes vieron a Estéfano Conde quebrarse por la emoción, quisieron pedirle que no cometiera tan brutal acto heroico, pero todo fue inútil.

Horrorosa fue la decepción que se llevaron cuando al ir por el cadáver de tan patriótico niño héroe, notaron que iba enredado (eso sí) en una bandera tricolor que todos pensamos que era la de México cuando en realidad era la de su país de origen: Italia. ¿Y cómo se dieron cuenta? ¡Porque le faltaba el águila! (Eso no le quita lo niño héroe)…POSDATA: ¿Otra pregunta inocente? ¿Al proyecto de la Universidad Politécnica del Golfo también le partieron la madre?...

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