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Tiempo de política

Salvador Fernández

Publicado en el DIARIO DE TABASCO EL UNIVERSAL

ISSET, La caja “negra”

Cuando ocurre un accidente aéreo los peritos buscan en primer lugar entre los restos de las naves la famosa “caja negra” con la grabación de las últimas conversaciones con la torre de control o llamadas de auxilio de los tripulantes ante el inminente percance.

Explican los especialistas que los primeros modelos de grabadoras de vuelo (como es su nombre oficial), tenían una cubierta de acero con pinturas especiales con función antioxidante y de amortiguador de vibraciones y golpes, con textura similar al alquitrán, y es de color negro (como el asfalto de las calles).

Desde hace ya mucho tiempo, las cajas negras modernas tienen color naranja vibrante, también conocido como fluo o fluor. Esto hace que pueda recuperarse más rápidamente entre el lodo en fondo del mar, las aguas oscuras de un lago, el césped y la vegetación de la selva. Este color le da mayor visibilidad.

Pues bien en Tabasco hubo un accidente político, económico, social, cultural etc, etc, con la accidentada administración de Arturo Núñez Jiménez y ahora los auditores andan detrás de la “caja negra” para sacar a flote todos los saqueos, robos y desfalcos al presupuesto del estado denunciados todos los días.

Luego del más reciente escándalo con la denuncia del director del ISSET, Fernando Mayans Canabal, quien no encontró los ocho mil millones del fondo de pensiones, el presidente de la Comisión de Salud del Congreso local, diputado Manuel Antonio Gordillo Bonfil, alerta que esa institución de seguridad social para las decenas de miles de burócratas pudo ser la “caja grande” del ex mandatario Núñez Jiménez.

El legislador por morena urge se realicen a fondo las investigaciones para saber cómo se otorgaron las irregulares millonarias pensiones y por supuesto todo lo denunciado por el doctor Mayans Canabal.

Esta “caja grande” o “negra” del accidentado gobierno nuñizta más que un hilo para desenrollar la madeja de la corrupción del sexenio pasado, es una rayita más al tigre que ciertamente nunca estuvo “ni manco ni tullido” a la hora de meterle la mano al cajón del presupuesto del estado.

Debe hacerse la precisión que en esta ocasión el color original de la caja fue amarillo perredista, en descargo del naranja que corresponde al Partido de Movimiento Ciudadano.

TIEMPO PERDIDO.-
Y a propósito del sol azteca, el ex candidato a la gubernatura Gerardo Gaudiano Rovirosa, -el mismo que tuvo medio millar de aviadores en su campaña pagados por el ayuntamiento de Centro de la presidenta Casilda Ruiz- pulula lastimosamente por los municipios del estado orando en el desierto, como la de ayer en Cunduacán.

En reuniones desoladas, con auditorios que bien caben una selfie el ex alcalde que prometió ser el mejor presidente municipal del país y como calificación inequivoca a su cuestionado desempeño fue aporreado por los habitantes de centro en las pasadas elecciones, llama a la unidad perredista por la que nunca trabajó. Asegura sin que el mismo lo crea que en el cascarón de ese partido están los mejores hombres, seguramente encabezados por Arturo Núñez, Agustín Silva, Ricardo Fitz, por quien su compañera diputada y de partido, Elsy Izquierdo, afirma que no meterá las manos al fuego si se comprueban los presuntos desvíos cuando estuvo al frente de la Sernapam.

TIEMPO FUERA.-
¿Cabrán en el Creset todos los funcionarios perredistas del sexenio pasado señalados de actos de corrupción, o habrá que construir un anexo?

sfernandez@ddt.mx