Ocho años de ser “Pueblo Mágico”
Centro Histórico fue sede de magníficos eventos por aniversario
Palizada, Campeche.- Con la entusiasta participación de artesanos y comerciantes de los pueblos mágicos de Palenque, Chiapas y Tapijulapa, Tabasco, además de locatarios del mercado público, así como empresas particulares que le apuestan al turismo, se llevó a efecto la celebración del octavo aniversario por la inclusión del programa federal de Turismo a Palizada como Pueblo Mágico, que ha permitido ir avanzando en la materia y tratando de consolidarlo como parte importante para el desarrollo de la economía local.
Las actividades arrancaron desde las 11 horas de este domingo, cuando fue cortado el listón inaugural de las diversas actividades en el Centro Histórico, en los portales que rodean el Parque Juárez se presentó una muestra gastronómica en la que participaron alumnos y maestros del Centro de Capacitación para el Trabajo (Cecat) del área de gastronomía, así como empresas locales que vienen trabajando productos de la región en forma artesanal y que les permite hoy en día contar con mermeladas de la principal fruta, el mango, además de mantequillas, quesos, miel de caña, pan de plátano, entre otros productos.
Se pudo notar la presencia por primera vez entusiasta de la mayoría de los locatarios del mercado público, quienes presentaron sus mejores antojitos, como panuchos, tamales y una gama de dulces con frutas de la región; se contó con el chocolate del “Negro Ali”, el de mayor renombre y visitado por quienes llegan a Palizada a conocerlo y por los propios lugareños. Estuvieron presentes también dos empresas locales que se dedican a la venta de aguas frescas embotelladas, entre otros.
Mientras que los artesanos locales, junto con los provenientes de Palenque, Chiapas y Tapijulapa, mostraron sus productos, el primero a base del café que es su fuerte, así como el grabado en diversos materiales de figuras mayas, mientras que los tabasqueños trajeron consigo su mejor atractivo y que son los muebles y figuras logradas a base del mimbre, sin faltar lo que hacen las manos paliceñas y que son principalmente bordados.
Se pudo notar la presencia de dos Unidades de Manejo Ambiental (UMAS), la de cocodrilos que llevó como muestra piezas artesanales logradas a base de la piel de este animal y el cual están ya comercializando, lo mismo que la UMA San Román, que a través de su trabajo presentó figuras de palo de tinto y algunos recuerdos con fotografías de aves propias de la zona.
(Texto y fotos Julio Gutiérrez)
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