“Porque no para siempre será olvidado el menesteroso,
Ni la esperanza de los pobres perecerá perpetuamente...”
Salmos 9:18
Respetar las voces de la naturaleza…
Alfredo A. Calderón Cámara
alfredocalderon1960@gmail.com
El pobre es pobre porque no puede dejar de serlo. Romper ese círculo penoso, combatir la pobreza y abatir la desigualdad social, es sin duda, una de las grandes tareas del presidente Andrés Manuel López Obrador quién de acuerdo a la agenda dictada por la Secretaria de Bienestar del Gobierno de México, María Luisa Albores González, que hace dos días convivió con 62 productores de Cerro Blanco quinta sección, Tacotalpa; hoy, en el poblado C-27, del municipio de Cárdenas, Tabasco el presidente de México tiene programado poner en marcha el programa “Sembrando vidas”. Ubicando estilos y programas, López Obrador otorga medios para que los que menos tienen logren el sustento limpio que deja el trabajo, constituyendo el programa “Sembrando Vidas en una de las columnas vertebrales del importante esfuerzo nacional para combatir el saldo deficitario tanto ambiental como con la justicia social.
Esta propuesta presidencial a la cual Tabasco se ha sumado con particular entusiasmo, considera de entrada la siembra de 150 mil hectáreas con árboles frutales y maderables de beneficio para los 17 municipios, con sede en tres regiones: Balancán, Comalcalco y Teapa, donde el gobierno del estado desde cuatro invernaderos pondrá todas las plantas necesitadas; por ello, las políticas desarrolladas por el presidente López Obrador tienen como objetivo promover la inclusión productiva a favor de quienes no se les ha dado oportunidad de crecimiento y desarrollo; en este caso, explicó, de productores y campesinos que viven en condición de pobreza pero que son dueños de pequeñas tierras; además de impulsar la restauración productiva, con sistemas agroforestales en un millón de hectáreas en 19 estados, atendiendo de manera inmediata la pobreza rural y la degradación ambiental que hoy golpea al país.
Para Andrés Manuel López Obrador no basta combatir la pobreza; entiende el presidente que de poco sirve pavimentar las calles de los pobres y “potabilizar” o “alumbrar” su miseria; lo ha dicho una y otra vez, se tienen que combatir las causas de la pobreza, la ausencia de capacidades básicas que le impide a la gente mejorar sus niveles de ingreso y consumo y esas capacidades básicas están íntimamente vinculadas con el déficit en salud, nutrición, educación y vivienda; por ello, el programa que hoy echará andar el presidente representa dignidad y firmeza además de rescatar el campo y al mismo tiempo regenerar las comunidades, por lo que se prevé generar 400 mil empleos en el país, además de respetar las voces de la naturaleza…
EL SEPTIMO SELLO
Jaime Salazar Hernández, Jefe de Recursos Humanos de la Delegación del ISSSTE en Tabasco, es un hombre terco, misógino, abusivo con sus subalternos, un hombre que fue corrido como maestro del Cobatab por su necedad; sin embargo, no aprendió de sus errores y ahora se ha dado cuenta que tiene un aguijón en el ISSSTE que no soporta; ese aguijón son sus triquiñuelas que no pocas veces trata de hacer, no se da cuenta que los tiempos ya cambiaron y el ISSSTE no es de su propiedad para hacer y deshacer como le viene en gana. Lo peor, piensa que esta en condiciones de correr a quien él quiera cuando no se da cuenta que parte de la Cuarta Transformación es dejar las corruptelas a un lado y seguir el ejemplo de López Obrador. Cierto es que su actitud misógina y su violencia de género le va a causar muchos dolores de cabeza.
LA SEPTIMA TROMPETA
Ahora bien, por más que Jaime Salazar Hernández trate de embarcar al Delegado Estatal, el doctor Ventura Moguel, en una loca aventura; es de tomar en cuenta que quienes conocen a Moguel Pérez, pueden decir con propiedad que siempre se ha distinguido por ser un caballero que tiene una regla de norma y conducta que le impide entrar en complicidades para dañar a alguna persona; luego entonces, el plan de usar artimañas administrativas para lesionar los intereses de quienes piensan que no pueden defenderse en el ISSSTE, es una verdadera “barrabasada” porque Salazar Hernández se ha sentado en un barril de pólvora que no tarde en repercutir. Cierto es que es del dominio público que desde su llegada al ISSSTE ha tratado de llenar de incondicionales la delegación estatal. La realidad es esto apenas comienza y la tortuga tiene demasiada sangre por tirar. También puede revisar esta columna en el portal http://www.elimparcialdetabasco.com/. A sus órdenes al teléfono 9931607242.
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