Actividad volcánica en Chiapas debe prevenirse: Expertos
Publicado en Azteca Noticias
Fuente Notimex
Expertos exhortan a tomar precauciones en Chiapas ante actividad volc�
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Expertos del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se pronunciaron por establecer medidas de prevención ante los riesgos para la población por la actividad volcánica y la presencia de fenómenos hidrometeorológicos.
La especialista Alondra Gil Ríos indicó que alrededor del volcán El Chichón, en la zona norte con influencia en unos siete municipios, viven unas 12 mil personas, mientras que en las faldas de El Tacaná, poco más de 80 mil, donde el riesgo persiste porque ambos se encuentran activos. "Los dos volcanes están muy activos, tenemos que estar conscientes y preparados, pues no estamos ajenos a sufrir una explosión, no es la actividad similar a la que presenta el Popocatépetl, pero están vivos, están quietos los de Chiapas, no están expulsando la energía, tenemos que aprender a convivir con el fenómeno y estar en alerta", afirmó.
En tanto que los riesgos por la ocurrencia de los fenómenos hidrometeorológicos aumentan debido a que en muchos municipios del estado ya ha habido devastación por desbordamiento de ríos, principalmente desde 1998 a la fecha, dijo. Explicó que donde ya hubo inundaciones, salida de los ríos de su cauce, al riesgo es mucho mayor, lo que puede pasar con las futuras precipitaciones es que muchos sitios ya afectados se pueden volver a siniestrar.
Manifestó que tenemos que identificar sobre qué zona vivimos para enseñar a las familias a convivir con el fenómeno pero prevenir los riesgos; hay que reconocer que entre municipios de las zonas Sierra, Costa y Soconusco suman más de 80 ríos peligrosos que ya se han desbordado y generado devastación.
Por ellos y en esas zonas hay que estar alertas, pero también enseñar a la población a comprender los ríos, conocer las medidas de prevención, las rutas de evacuación, albergues, sitios de posibles deslizamientos de suelos, agregó Gil Ríos. Por supuesto, destacó, lo que no se debe generar es miedo, sino capacitación, "la explosión de El Chichón en 1982 nos ha dejado enseñanzas, como las inundaciones recurrentes, pero eso hay que establecer líneas de acción para saber qué hacer en casos de desastres naturales".
Resaltó que tenemos que reconocer que por las lluvias los riesgos aumentan por la pérdida de la cubierta forestal, está latente el fenómeno de remoción de suelos, pero muchas veces generamos mayor riesgo al construir carreteras donde los taludes quedan muy pendientes, de 90 grados.
Se podría prevenir un poco el desastre natural con la reforestación, pero muchas veces "sale contraproducente, porque hacemos la hacemos de manera superficial, en lugar de que las raíces de los árboles detengan el terreno, aumenta el peso y con ello se acelera el movimiento de masa", indicó.
La especialista Alondra Gil Ríos indicó que alrededor del volcán El Chichón, en la zona norte con influencia en unos siete municipios, viven unas 12 mil personas, mientras que en las faldas de El Tacaná, poco más de 80 mil, donde el riesgo persiste porque ambos se encuentran activos. "Los dos volcanes están muy activos, tenemos que estar conscientes y preparados, pues no estamos ajenos a sufrir una explosión, no es la actividad similar a la que presenta el Popocatépetl, pero están vivos, están quietos los de Chiapas, no están expulsando la energía, tenemos que aprender a convivir con el fenómeno y estar en alerta", afirmó.
En tanto que los riesgos por la ocurrencia de los fenómenos hidrometeorológicos aumentan debido a que en muchos municipios del estado ya ha habido devastación por desbordamiento de ríos, principalmente desde 1998 a la fecha, dijo. Explicó que donde ya hubo inundaciones, salida de los ríos de su cauce, al riesgo es mucho mayor, lo que puede pasar con las futuras precipitaciones es que muchos sitios ya afectados se pueden volver a siniestrar.
Manifestó que tenemos que identificar sobre qué zona vivimos para enseñar a las familias a convivir con el fenómeno pero prevenir los riesgos; hay que reconocer que entre municipios de las zonas Sierra, Costa y Soconusco suman más de 80 ríos peligrosos que ya se han desbordado y generado devastación.
Por ellos y en esas zonas hay que estar alertas, pero también enseñar a la población a comprender los ríos, conocer las medidas de prevención, las rutas de evacuación, albergues, sitios de posibles deslizamientos de suelos, agregó Gil Ríos. Por supuesto, destacó, lo que no se debe generar es miedo, sino capacitación, "la explosión de El Chichón en 1982 nos ha dejado enseñanzas, como las inundaciones recurrentes, pero eso hay que establecer líneas de acción para saber qué hacer en casos de desastres naturales".
Resaltó que tenemos que reconocer que por las lluvias los riesgos aumentan por la pérdida de la cubierta forestal, está latente el fenómeno de remoción de suelos, pero muchas veces generamos mayor riesgo al construir carreteras donde los taludes quedan muy pendientes, de 90 grados.
Se podría prevenir un poco el desastre natural con la reforestación, pero muchas veces "sale contraproducente, porque hacemos la hacemos de manera superficial, en lugar de que las raíces de los árboles detengan el terreno, aumenta el peso y con ello se acelera el movimiento de masa", indicó.
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