López Obrador, va por su tercera campaña a la presidencia
José Martínez
Publicado en el DIARIO AVANCE TABASCO
El pasado domingo 20 de noviembre Andrés Manuel López Obrador hizo la presentación pública de su nuevo Proyecto Alternativo de Nación 2018-2024, contenida en 50 lineamientos Básicos según explicó. El propio político tabasqueño lo definió como un programa basado en el combate a la corrupción, austeridad, justicia social y sentido común.
Ante un auditorio integrado por militantes y simpatizantes del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), casi todos delegados al Congreso Nacional partidista, el paisano se comprometió a la reducción del gasto en publicidad oficial, reducción del salario del posible próximo Presidente mexicano, quien estaría sometido a la revocación de mandato; también dijo que revertiría las reformas estructurales impulsadas por Enrique Peña Nieto (laboral, educativa, fiscal, energética, entre otras).
Planteó la recuperación del campo, dando importancia a las prácticas ancestrales y ecológicas, la prohibición de las semillas transgénicas y en general la protección de la biodiversidad mexicana.
También sostuvo que propone Morena –su partido- la construcción de refinerías; dijo que las hidroeléctricas operarán a toda su capacidad para reducir la compra de energía eléctrica a empresas extranjeras y se promocionaran de fuentes de energía renovable y limpia.
Se comprometió a generar un millón de empleos al año, reducción del IVA y del impuesto sobre la renta, mejorar los salarios.
Habló del corredor del Istmo de Tehuantepec, ahora reforzada como zona franca en la que participen los dueños de las tierras en los proyectos que se integren en la zona. También habló de la modernización de la red actual de carreteras.
Con relación a la población juvenil –y como un mensaje para atraerlos a su proyecto-, propuso crear un programa especial en el que se incluyen acciones de educación y generación de empleo para este segmento.
Otro segmento de la población al que le destinó su mensaje fue a los adultos mayores, para quienes –como lo hizo en la Ciudad de México- ofreció elevar la pensión, así como garantizarles el derecho a la atención médica y a los medicamentos gratuitos.
El político tabasqueño que va por su tercera campaña a la Presidencia –en el 2006 estuvo a menos de un punto de medio punto porcentual de conseguirla- mantiene su discurso de no hacer alianza con partido alguno, pero hizo un llamado a los militantes y simpatizantes de otros partidos para sumarse a su movimiento. A decir de López Obrador “los verdaderos adversarios” están en las cúpulas del poder económico y político, y en las burocracias corruptas de los partidos.
No parece fácil que un aspirante a la Presidencia pueda lograr el mayor porcentaje de votos sin acudir a las alianzas tanto con partidos como con un segmento del poder económico. López Obrador sostiene que sí es posible. Como se ha escrito en otro lado: no se trata sólo de ganar en las urnas, sino de poder gobernar. El mejor ejemplo de la necesidad que un ganador de las votaciones tiene de un andamiaje legislativo y financiero es Jaime Calderón, El Bronco, quien llegó al poder como independiente. Gana, pero no gobierna.
En el caso de López Obrador, sus adversarios lo pretenden descarrilar comparándolo con Donald Trump, en imprevisible y sorpresivo personaje que obtuvo la presidencia de Estados Unidos. Resulta por lo menos absurdo el argumento.
HABERES
LOS PRIISTAS, después de tanto exigir, ya tienen delegado para llevar a efecto la renovación de su dirigencia. Jorge Salomón Azar, ex gobernador de Campeche, quien por cierto trae muy malas cartas de presentación.
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