No solo se juega la alcaldía, hay quienes buscan amarrar el 2018
José Martínez
Publicado en el Diario AVANCE Tabasco
Está a punto de terminar la espera. Hay cuenta regresiva para saber si el domingo los candidatos, los partidos y las autoridades lograron convencer a un mayor número de ciudadanos acudir a las urnas. Es tanto el abstencionismo que el Instituto Nacional Electoral se puso como meta un 50 por ciento de participación.
Existe una franja importante de la población que observa a los candidatos con cara de cansancio, y hasta apatía y desgano. Escuchan en los discursos lo mismo. Todos prometen componer al municipio, darle una nueva cara a Centro, ser incluyentes, y se comprometen con medio mundo, pero al final, es más de lo mismo, escuchamos decir entre los incrédulos.
Para algunos es tal la falta de enjundia en las campañas –hay quien sostiene que esto es resultado de leyes electorales limitantes más que incentivantes- que hasta los diputaos han entrado “al quite”. Ahí los tenemos dándose duro y tupido, salpicando hasta a quienes no tienen ni siquiera “vela en el entierro”. Pareciera que buscan hacer candente el tema de la elección o mínimo ser el protagonista del día quizá más preocupados de su propia carrera política, buscando anotarse para el 2018, y menos preocupados porque a esta capital tabasqueña le vaya mejor.
Quienes también estarán a prueba en estas elecciones son los dirigentes de los institutos políticos. Su trabajo será calificado en función de lo que hayan logrado hacer. Debutantes en la conducción de sus partidos para estos comicios son Miguel Ángel Valdivia, en el PRI y Adán Augusto López en Morena. El primero fue sacado de la banca y el segundo tuvo que dejar la envidiable posición de senador. Quien más juega en este lance es precisamente López Hernández, no sólo porque aparece en los anuncios de Morena como si fuera candidato, sino porque en este proceso se decide su posible candidatura para el gobierno en el 2018…con la sombra de Evaristo Hernández pisándole los talones. También se juega el prestigio de Andrés Manuel López Obrador quien hizo campaña por la alcaldía.
Quien ya se probó y con suerte en las lides electorales es Federico Madrazo, el hijo del ex gobernador Roberto Madrazo venía de una derrota en el 2015 cuando perdió ante una casi desconocida Leticia Taracena. Tuvo la fortuna de sacar para el Partido Verde una votación no imaginada hasta hace unos años. Su reto es lograr mantenerse en los porcentajes que le permitan amarrar la postulación del 2018.
El PRD, partido en el gobierno, decidió no mover a su dirigente Candelario Pérez. En cambio dejó la campaña en manos de su mejor activo, el joven Gerardo Gaudiano. La ventaja de venir de varios recorridos de proselitismo de dio un alto nivel de conocimiento que sus adversarios buscaron contrarrestar buscando aumentar sus negativos.
Poco se puede decir del resto de los partidos que apoyan una candidatura común, tienen abanderados propios como el humanista, o del independiente Pedro Contreras, con una campaña más simbólica que efectiva.
Así van con sus partidos y coaliciones Gaudiano, Octavio Romero, Liliana Madrigal, Contreras y la señora Flor de Lis. Sólo les quedan unas horas para sumar otros pocos puntos…o no restarlos.
HABERES
Los que en realidad deberían estar pero bien apurados, son los consejeros electorales, que se están viendo muy lentos. En el INE están empantanados con las capacitaciones para los funcionarios de casillas. No escarmentaron con lo sucedido en las pasadas elecciones de junio. Dónde de plano están pasados, pero de metidas de pata, es en el IEPCT.
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