(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)
Feria sin “feria”
Los empresarios afiliados al consejo Coordinador Empresarial de Tabasco pareciera que tuvieran el propio enemigo en casa pues lejos de pugnar por crear un solo organismo que administre los recursos económicos que obtendrán derivado del 2.5 por ciento de impuesto sobre nómina que implemento el gobierno estatal para llevarles mejores beneficios, ahora quieren fragmentar y vez de sumar quieren dividir los ingresos para llevar que cada dirigente de cámara lleve agua a su molino.
jaclop62@hotmail.com
Paradójicamente al enfrentamiento interno por la administración de los recursos económicos que obtendrán del impuesto Sobre Nómina que les entregará el gobierno estatal, y que forzosamente debe ser administrado por un organismo que será regulado por las leyes fiscales, algunos dirigentes de Cámaras se han echado a cuestas el exigirle a las autoridades estatales la realización de la feria de los tabasqueños sosteniendo que son autosuficiente económicamente para echarse a cuestas el compromiso del jolgorio tabasqueño, pero en realidad pretenden hacer fiesta con dinero ajeno pues solamente quieren que les transfieran la realización, pero todos los gastos de operación preventiva y mantenimiento de las instalaciones donde se realiza, más los gastos extras que se origina antes de la festividad, quieren que siga corriendo por cuenta y riesgo del gobierno; que graciosos, quieren hacer feria con “feria” ajena.
En el primero de los casos, apenas esta semana los integrantes de la Junta Coordinadora Empresarial definirían los procedimientos a seguir para operar los recursos económicos que les serán entregados por las autoridades estatales, ya que mientras unos cuantos empresarios y contados dirigentes de las cámaras empresariales pretenden que se constituya un organismo financiero que sea el encargado de administrar los millones de pesos que recibirán, hay otros que creyendo que así llevarán agua a su molino, pretenden que cada cámara tenga su propio organismo financiero para administrar los recursos que les toque, cuando la finalidad de dichos fondos económicos es precisamente para incentivar el crecimiento de la rama productiva, es decir, servirá para ayudar a los propios empresarios, pero con carácter devolutivo, otros creen que si cada Cámara administra su propio recurso que podrían convertir en Sofoles dejarían de lado el cedazo de la fiscalización que debe haber en la utilización de los servicios y esto podría dar pauta para que una vez prestado el dinero fácilmente podría irse a fondo perdido y con ello, se vendría abajo el crecimiento de la misma rama productiva.
De acuerdo a los conocedores, uno de los impulsores de que los recursos económicos que recibirán del gobierno estatal, vía devolución, de una mínima parte del Impuesto Sobre Nómina, se le entregado a cada cámara empresarial que crearía su propio organismos fiduciario, es el ex-dirigente empresarial José Estrada Garrido, quien de alguna manera está empinando en el viaje al presidente de la Coparmex, Daniel Vázquez, a quien pretende manipular para que impulsen este proyecto que de alguna manera permitiera que los recursos económicos que se le entreguen en calidad de préstamo a los propios empresarios no sean devueltos, como debe de ser, sino que se vaya a fondo perdido y con ello, tendría a esos empresarios en su bolsa, quienes gozarían de alguna manera del paternalismo gubernamental, mientras que otro sector de empresarios más visionarios, pugnan, porque esa una sola fiduciaria la que administre los recursos económicos que recibirán del gobierno, siguiendo todo un procedimientos fiscal para realizar los préstamos y su devolución, que permitiría incrementar el dinero y lograr el crecimiento empresarial. Eh ahí dos visiones distintas de los empresarios.
Pero si tomamos en cuenta esas dos visiones empresariales de cómo manejar el dinero, es fácil suponer que uno de los sectores empresariales que pugnan porque el gobierno estatal les transfiera la realización de la feria, creyéndose autosuficiente económicamente cuando en realidad no lo son, en realidad quieren hacer la feria con “feria ajena”. La organización de la feria cuesta dinero, mucho dinero, dinero que los mismos empresarios no serían capaces de soltar para realizar el jolgorio choco, porqué no les gusta arriesgar, aaahh, pero que fácil sería para ellos que el propio gobierno estatal les sirva la mesa y ellos solamente la presencia para decir que saben hacer las cosas.
Más fácil, solamente en los preparativos y mantenimiento del inmueble donde se realizará la feria el gobierno estatal invierte unos 20 millones de pesos; para empezar, los empresarios tendrían que aclarar de donde sacarían inicialmente esos veinte millones de pesos para mantenimiento, ¿habría alguno de ellos, o se agruparían para hacer la “vaquita” y agarrar al toro por los cuernos?, esto, nada más para empezar y de allí pa´l real quienes aportarían los recursos económicos durante la realización de la feria, ahora, si lo que ese sector empresarial pretende que les cedan la realización de la feria y que el gobierno estatal siga aportando los recursos económicos, pues que jodidos están, porque así cualquier mortal realizaría una feria. Para la feria se monta toda una infraestructura que solamente el gobierno estatal en turno posee, desde el manejo de las vialidades, el transporte público, la seguridad pública, la atención médica de los sectores de salud, y todas las demás cosas que indispensables para que una feria salga bien, de tal suerte que los empresarios tabasqueños están en pañales para hacerse cargo de esta festividad.
Vista las cosas de esa manera, el gobierno estatal, debe seguir haciendo la feria, no puede ceder la feria a la Iniciativa Privada, porque estos no arriesgarían su capital económico, ya que solamente de lengua dicen que son solventes, por lo tanto, nada se ganaría con que el gobierno aporte los recursos económicos y los otros solamente se alcen el cuello como organizadores, cuando precisamente una privatización de esa fiesta conllevaría a que el gobierno no aporte un solo peso y no que se le haga la carga más onerosa.
Si entre los empresarios existe en este momento la disputa de cómo se administran los recursos económicos provenientes de la participación que les corresponde del Impuesto Sobre Nómina, ya se imaginan la forma en que pretenderán administrar la feria de los tabasqueños, nadie querrá poner, pero si todos agarrar.
Otra razón súper poderosa, por la que el gobierno estatal no debe ceder los derechos de la feria a los empresarios, que de alguna manera han vivido de la paternidad gubernamental, es precisamente que durante quince, veinte o treinta días, el gobernador en turno se da baños de pueblo, desde que inicia la festividad con los carros alegóricos, la elección de la Flor más Bella, hasta llegar al inicio de la feria, donde el gobernador se da un verdadero baño de pueblo, acude a la inauguración de los stand, acude a los pabellones municipales y durante ese tiempo convive con su pueblo, convive con empresarios, ganaderos, y todos los que de alguna manera tienen algo que exhibir en la feria, convirtiéndose más en una feria social y política.
Finalmente el grueso de la población que está acostumbrado a que realicen la feria, no le interesa que lo administre la Iniciativa Privada, sino que se haga, pero bien, por lo que el mismo gobierno estatal debe sopesar la conveniencia de entregarlo al sector empresarial porque a la larga, puede resultar más contraproducente que beneficioso, porque se le estaría inyectando dinero oficial a una feria que sería del sector privado, y entonces no se saldría de apuros. Pero además sí se privatiza la feria, ¿cuál sería la participación de los ayuntamientos? , ¿acaso los presidentes municipales estarían obligados a enviar a su embajadora costeándole los gastos, o todo eso correría por cuenta de los empresarios que quieren la privatización?, entregar la feria a los empresarios no es cosa fácil, aunque ellos crean que así de fácil pueden hacer la feria. Mejor que los empresarios hagan su propia feria si quieren gastar su dinero, a ver si es cierto que están dispuestos a arriesgar su dinero, pero si están esperanzados a hacer la feria con “feria” ajena, pues mejor que el gobierno estatal siga organizando la feria, porque con dinero ajeno cualquiera hace fiesta.
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