Ojo Visor: Jacinto López Cruz /Abr 15

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(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)

“La pequeñez humana”

jaclop62@hotmail.com

Los hombres que participan en la vida política, que buscan espacios de poder, siempre han buscado, ante todo, que a través de sus obras, de sus hechos concretos, de los beneficios aportados, logren trascender para que quede la huella perenne, para la posteridad, de todo lo realizado. Así tenemos, que los grandes gobernantes, los pensadores, los hombres de letras, han trascendido a través de la historia por sus obras realizadas.

Si bien es cierto que uno de los grandes problemas de México, y por supuesto de Tabasco es la falta de continuidad en los proyectos y programas que han dado resultados en la administración pública o más allá, pues han dejado un buen sabor de boca en los ciudadanos; síntoma negativo de muchos gobernantes es la pequeñez humana que demuestran, cuando de borrar toda huella exitosa de su antecesor se trata.

Y el Ojo Visor, que en todo está, y tiene memoria histórica, mucho más de los hechos recientes, no puede sino extrañarse por la ligereza y frivolidad con que el presidente municipal de Centro, Jesús Alí de la Torre se conduce, al tratar de borrar toda huella del evaristismo, pero por otra parte, sin haber calculado responsablemente el daño proferido, cubrió con una gigantesca lona, una obra cultura elaborada por la creación indígena de Tabasco, indígenas que por cierto, son la verdadera raíz de nuestro pueblo.

Raíz que quizás el munícipe con su bipolar actitud, no comprenda porque su raíz es emigrante, pero que en Tabasco precisamente le ha permitido el desarrollarse y ser el alcalde del municipio más grande de Tabasco.

Probablemente no fue bien asesorado al tratar de ocultar una obra magna que simboliza lo mejor de nosotros mismos, claro, seguramente no conoce nuestra historia, sin embargo creemos en el buen juicio de la doctora Romo, titular de Decur, quien en los próximos días habrá de mandar a quitar la ofensiva lona que anuncia jocosamente un Plan Municipal de Desarrollo, que por cierto, jamás fue consultado con la ciudadanía, pero que en el colmo del cinismo, no se ve que esté funcionando porque a tres meses de administración, se puede decir, que hay ayuntamientos que ya están sacando el buey de la barranca, pero el Centro no pinta ni da color, por los intereses mezquinos de los grupos enquistados al interior que se están dando hasta con la cubeta y que ya se apoderaron del ayuntamiento.

El mural “La Ceiba” realizada en la explanada del ayuntamiento de Centro, es una obra cultural del pinto Eliazar Hernández, y como un insulto a su creador y a quien antecediera en la alcaldía a Jesús Alí, éste ordenó taparlo con una enorme lona plástica que da difusión a su Plan Municipal de Desarrollo, y si se creyó que la lona sería retirada unos días después de que se realizó el evento donde Alí presentó su Plan como un culto a su personalidad bipolar, pues se equivocaron, pues han pasado los meses y la obra del pintor Chontal, oriundo de la ranchería La Ceiba, está tapada, lo cual representa no solo un insulto a la obra cultural de un indígena, sino un atentado en contra del patrimonio cultural de los tabasqueños, de esa etnia indígena que el alcalde de Centro dice querer o respetar, mostrando así su pequeñez humana, que es tan pequeño con sus falta de compromisos políticos con quienes lo apoyaron para que ganara la presidencia municipal y ahora se les esconde para no cumplir su palabra empeñada.

Pero si el mural “La Ceiba” está cubierta con una lona por la pequeñez humana del alcalde, en peores condiciones se encuentra el mural urbano “La Ceiba”, realizada en la vieja estructura metálica, de 30 metros de altura, del tanque elevado de agua, que se localiza en la prolongación de Paseo Usumacinta y que ahora está en penumbras. La majestuosa Ceiba, es de un color verde que refleja el respeto por la naturaleza, con jaguares, búhos, duendes, ardillas, loros guacamayas, y diferentes aves del paisaje tabasqueño que fue financiado por diversos empresarios como el regiomontano Guillermo Canavati Villareal, director de grupo Publirex; José Luis Lacruz, director de Schlenberger; Marco Antonio Gallegos Martínez, representante de Pinturas Doal; Luís Molina Riviera, el arquitecto Jorge de Dios Morales, y Alejandro Tovar Domínguez, como una forma de promover el arte, y cuyo costo oscila en más de dos millones de pesos, ahora luce abandonada, quizás como una forma del ahora presidente municipal por cobrarse viejos agravios en contra de Evaristo Hernández, pero en realidad, no entiende que está atentando en contra de un patrimonio cultural de los tabasqueños.

¿Qué dirán estos empresarios al ver que sus aportaciones para incrementar el patrimonio cultural de los tabasqueños es hecha añicos por un alcalde deseoso de venganza política? La comunidad cultura debe sentirse agraviada por éste hecho, debe exigir al alcalde que tanto el mural que se encuentra en la explanada del ayuntamiento le sea retirada esa lona que la cubre, como se ilumine el mural del tanque de agua, porque lo que se ha hecho es un atentado en contra de las obras culturales, más aún, porque proviene de un artista de la etnia Chontal como Eliazar, esa etnia que en campaña cobijó a Alí en unas de sus casas, pero que ahora, agravia a un artista indígena.

OJITOS

Ayer por la tarde corrió fuerte el rumor de que el secretario del ayuntamiento de Centro, César Rojas Rabelo había renunciado a su cargo por presuntas desavenencias con el bipolar alcalde, que un día dice una cosa, cuando está de buen humor, pero en unas cuantas horas cambia de actitud, porque se pone de mal humor, y es que el problema de salud que desde hace años padece Alí, lo convierte en una persona emocionalmente inestable. De ser cierta, esta renuncia, nubarrones grises pronto cubrirán la comuna de Centro.

VISORCITO

El ayuntamiento de Macuspana que preside Alfonso Pérez Alvarez, ha citado el día de hoy martes a una rueda de prensa en ese municipio a todos los medios de comunicación del estado para dar a conocer cuál fue el estado en que recibió la administración municipal que le entregó el perredista Elías Alvarez Zurita.

A la par de la información que hoy dejará perplejos a muchos, porque el robo descarado a las arcas públicas y el saqueo a los bienes mueble e inmuebles del mismo ayuntamiento suman varios millones de pesos, las autoridades competentes ya trabajan intensamente, revisando toda la documentación con el objetivo de fincar responsabilidades penales contra todos los ex-funcionarios municipales de extracción perredista que no pudieron justificar el desfalco al erario público, pese a que la normatividad les permitió tomarse el tiempo para solventarlas, pero aun así, no tuvieron elementos de que echar mano para demostrar que los recursos económicos faltantes.

Todo indica que no habrá intocables y que tanto el ex-alcalde Fredy Martínez Colomé como el que lo sucedió en el cargo, Elías Alvarez Zurita, están con un pie en la cárcel por haber dispuesto a sus anchas del patrimonio del ayuntamiento sin que hayan solventado o demostrado donde invirtieron los recursos económicos que no aparecieron por ninguna parte. La venta de las hectáreas de tierra que formaban parte del proyecto Macuspana Siglo XXI que fue rematado por Elías Alvarez a José Vázquez Cancino, a precio irrisorio, a millón de pesos la hectárea cuando su valor catastral es mayor, es una brutal irregularidad cuyo grueso expediente ya está en sus manos de la Procuraduría General de Justicia. Es un hecho de que rodarán cabezas de ex-funcionarios municipales perredistas, que irán a la cárcel, así como está el ex-alcalde de Jalapa, Antonio Priego. En Macuspana no debe haber intocables, y si el PRD pretende politizar este asunto, hay que exhibir los documentos para que el pueblo conozca que también en ese partido hay ratas de dos patas.