Ante violencia huyen por sus vidas en Chalchihuitán
Publicado en el DIARIO DE CHIAPAS
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25 noviembre, 2017
• Derivado de la ola de violencia generada por grupos paramilitares, presuntamente impulsados por la alcaldesa de Chenalhó, Rosa Pérez: piden desbloquear carreteras
Estampida de cientos de familias enteras del municipio de Chalchihuitán en las últimas horas. Huyen ante la violencia que, “han generado los grupos de paramilitares impulsados por la alcaldesa de Chenalhó, Rosa Pérez Pérez”.
De acuerdo al reporte proporcionado por los afectados son los tres municipios cercanos como: Chiapa de Corzo, Ixtapa y San Cristóbal de las Casas, donde se están refugiando.
Los afectados han perdido sus hogares tras ser incendiados y hasta hoy se registran dos víctimas desde que comenzó el conflicto, ocasionado por límites entre ambos municipios y avivado por Rosa Pérez.
Hay que recordar que se buscaba alcanzar un acuerdo. “Las diferentes comunidades del nivel municipio, se llevó a cabo una asamblea general en la presidencia municipal, en donde se informó a las autoridades sobre los compromisos del secretario general del gobierno del estado sobre la aplicación del Estado de derecho y en donde se nos ha pedido paciencia y no repelar la agresión para no caer en provocación, pero las últimas acciones están fuera de la tolerancia”, señaló uno de los afectados.
Advierten Abejas de Acteal tragedia
Durante el Foro “Dialéctica”, integrantes de la Sociedad Civil Las Abejas de Acteal y sobrevivientes de la masacre de 1997, dieron a conocer su temor de que el problema limítrofe entre Chenalhó y Chalchihuitán, termine en una tragedia como la ocurrida hace casi 20 años.
La sobreviviente de aquel entonces, Guadalupe Jiménez, consideró se vive en la actualidad, algo muy similar a lo que pasó en Acteal, ya que hay desplazados, armas de fuego e incluso pérdidas humanas.
Jorge Santiago, otro de los sobrevivientes, señaló que es necesario crear una conciencia en el país, lo cual es tarea de todos, no púnicamente de las víctimas, “lo que está sucediendo entre Chenalhó y Chalchihuitán es un aviso de lo que puede ocurrir, algo similar a lo que sucedió hace 20 años”.
Por su parte, Estela Barco anunció que ya se encuentran preparando una serie de actividades para el mes de diciembre, mes en el que se cumplen dos décadas de impunidad en Acteal.
“Hubieron muchas violaciones de derechos humanos contra las personas detenidas, los responsables fueron liberados, por lo que sigue impune esa masacre de 45 personas que fue bajo la presión de ser parte de un partido político o bien para apoyarlo, fue una guerra impulsada por el mal Gobierno y sus grupos paramilitares”.
Reseñó que desde que se firmó los acuerdos de San Andrés han sido “acuerdos firmados pero no cumplidos como lo dijo en su momento Ernesto Zedillo: prefiero pasar a la historia como represor antes de cumplir los acuerdos”.
“Está a punto de que se repita algo así con la problemática de Chalchihuitan y Chenalhó, donde el Gobierno niega lo que pasa, miente diciendo que no hay armas más que las permitidas por la ley”, concluyó.
Piden desbloquear carreteras
Ante la ola de violencia generada por grupos paramilitares, presuntamente impulsados por la alcaldesa de Chenalhó, Rosa Pérez Pérez, habitantes del municipio de Chalchihuitán, señalaron que a 11 días consecutivos del cierre de carreteras en la localidad, habitantes se han visto forzados a huir por tales acciones.
En entrevista, Domingo Díaz Pérez, habitante de Chalchihuitán, mencionó que a 11 días de solictar el cese de la violencia y represión del pueblo de Chenalhó, el estado ha mantenido una actitud de solapamiento con la presidencia municipal de Pérez Pérez, ya que persisten los ataques con armas de fuego.
“Favoreciendo y solapando los bloqueos sin darle importancia, tomando las consecuencias que hay. Aunando de esto, durante estos 11 días han intensificado los disparos de armas de fuego de alto calibre y revuelto con detonaciones bombas, que desconocemos de bombas, porque cada noche hay bombazos”, dijo.
De esta forma, puntualizó que ante el incremento de la violencia, la falta de alimentos y servicios, la población indígena ha empezado a huir, ya que Chalchihuitán se encuetra secuestrado por el municipio de Rosa Pérez.
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