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Tiempo de política

Salvador Fernández

Publicado en el DIARIO DE TABSCO EL UNIVERSAL 

Salud, estados fallidos

La decisión centralista del presidente Andrés Manuel López Obrador de “federalizar” el sistema de salud de ocho estados del sureste es la aceptación mutua –estados-federación- de la incompetencia de de las entidades de asumir la responsabilidad de brindar a sus habitantes la segunda encomienda después de la seguridad.

En otros estados como Michoacán del perredista Silvano Aureoles también ya botaron la responsabilidad de ofrecer educación a sus gobernados.

¿Qué pasó en Tabasco? Por qué los hospitales y clínicas carecen de medicamentos y hasta el más elemental material de limpieza. No es un asunto de un sistema federal, de autonomía, de soberanía estatal, es un problema de administración que tiene el pretexto de lesa humanidad de la caída de los precios del petróleo.

Me recuerda el aumento del precio del litro de petróleo en la colonia, porque la dueña de la miscelánea de la ranchería vio en la televisión que aumentaron las cotizaciones de los barriles del crudo en el mar de Brent y en la OPEP.

Con el anuncio del presidente Andrés Manuel López Obrador de “federalizar” el sistema de salud es una aceptación de que los estados fallaron en su responsabilidad de brindar el servicio de salud a su población, es una centralización producto de incompetencia y/o corrupción por culpa de gobernadores con minoría de edad gubernamental.

Aparejado al rescate federal de los sistemas de salud, debe ir una auditoría para saber las causas por qué estados como Tabasco no pudieron cumplir con su responsabilidad de brindar servicios de salud a su población.

Cómo entender “no hay cacería de brujas”, con “nada por encima de la ley” y “nadie al margen de la ley” o al revés volteado. Que alguien explique a los 30 millones de mexicanos que votaron por el fin de la corrupción dónde y con quiénes empieza y termina el famoso “punto final”.

TIEMPO DE MODERNIDAD.-
La primera piedra del Tren Maya en Palenque, porque aquí no hubo tal de la refinería en Dos Bocas, comenzará hacer justicia a los estados del sureste y a los pueblos originarios de esta región.
“Modernidad de abajo hacia arriba” diría el originario de Tepetitán, Tabasco. El ritual de pedir permiso a la madre tierra para el paso de la moderna bestia que tendrá el encargo de bajar parte a de los 10 millones de turistas que visitan la costa del Caribe mexicano hacia las maravillosas zonas arqueológicas de Campeche, Tabasco y Chiapas.

Los pueblos originarios del sureste esperan ser los primeros beneficiados de la que se considera una de las más grandes obras del sexenio del primer tabasqueño en llegar a la Presidencia de la República.

TIEMPO FUERA.-
De lo perdido lo que aparezca. El consuelo de que América sea campeón de la liga es que su entrenador sea mexicano, después de un desfile de sudamericanos y ninguneo del talento nacional. Contratan entrenadores extranjeros, los mismos de siempre, hasta en la segunda división llamada pomposamente Primera “A”. El “Piojo” para presidente si el “Cuau” no dice otra cosa.

sfernandez@ddt.mx