Termómetro Político: Gerardo Amézquita Hernández /Mar 04

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La idea de retirar el material de pornografía visual en las calles
no es mala, lo malo es que será difícil que se lleve a cabo

“Cuando más moral es el hombre, menos acusa de inmoralidad a los demás” Cicerón

No, pues, si el diputado Miguel Ángel Moheno Piñera a sus palabras uniera los hechos muchos se quitarían el sombrero y la verdad que existen muy pocos moralistas que cumplen al pie de la letra dicho precepto en el sentido de que el legislador urgió en tribuna que se buscara por todos los medios posibles cuidar el patrimonio generacional que posee el Estado conformado por la niñez y juventud tabasqueña. La moral.

Este punto de acuerdo presentado ayer miércoles por el señor diputado no es mala, lo malo va ser que se desengañe al no encontrar eco en sus palabras, y más aún porque cuando alguien dice algo es porque ya lo puso en práctica o por lo menos está luchando por llevarlo a fin termino, pero además no basta que en tan solo unos minutos alguien se convierta en moralista, y unos minutos más tarde ya no lo sea, es decir, el señor legislador tiene que traer detrás de si un sinfín de acciones que lo lleven a que los demás crean en sus palabras.

Pero además, tiene razón, es lo peor, tiene razón en cuanto que las calles del Estado están repletos de propaganda pornográfica, los puestos de revistas y publicidad venden más de esos tipos de revistas que otra cosa, ya no hay moral en esos lugares, ahí, todo mundo las ve, los niños las hojean, incluso hasta las compran, los jóvenes ni se digan, es de películas ni hablamos, eso está peor, en los sitios donde se alquilan películas, existen espacios repletos de ese tipo de material y también la ceden al mejor postor.

La idea expuesta no es mala, sus puntos de vista también son válidos, pero en la Cámara de diputados no creo que avalen esa propuesta, es decir, no llegarán a ponerse de acuerdo, y si por alguna razón le dieran validez, los empresarios alzarían la voz ante dicho arreglo, pues no les conviene, pues de eso viven, incluso algunos diarios de la entidad que para poder vender y estar en la competencia tienen que vender pornografía en sus página, pues eso es lo que la población quiere, o por lo menos el 80 por ciento de la metrópoli.

Además también pegarían el grito al cielo los presidentes municipales, aunque puede ser que no todos, pero si más de uno, aduciendo que ellos son independientes y que no los pueden obligar a cumplir dichas alianzas, que igual y se logran poner de acuerdos todos y, con eso se sacarían un diez, por el bien de su localidad y de Tabasco. Que dicho sea de paso, sería el Estado a la vanguardia en buscar nuevamente que la moral prevalezca en los 17 municipios, como lo propone el legislador priista.

Eso lo dijo durante la sesión de este miércoles, en el Congreso del Estado, cuando el legislador del Partido Revolucionario Institucional leyó el documento en el cual señala que los ayuntamientos, en uso de sus facultades conferidas por la Ley Orgánica de los Municipios, emitan las normas reglamentarias para restringir la venta y exhibición de material visual y literal pornográfico en la vía pública.

El escrito fue sustentado, bueno así lo dijo y yo le creo, en el efecto psico-emocional y social a que predisponen esas publicaciones, las cuales pueden provocar, sobretodo en los niños, conductas patológicas, en afectación de su sano desarrollo físico, mental y cultural, y los motiven a realizar conductas antisociales e inmorales, enfatizó.

Pues sin ir más lejos, ojala y tenga eco sus palabras, pues es necesario que la niñez y por supuesto la juventud tenga los valores cimentados desde el hogar, pero como ya no existen en los padres dichas valías pues que le pueden enseñar a sus hijos, por la otra hay que obligarlos a que cumplan por lo menos en eso, enseñándoles valores para que se tenga una sociedad mejor y más educada, más justa y con menos violencia, entre otras cosas.

Pero a lo dicho, para que las palabras tengan el impulso que se requiere, las tendría que decir alguien que a las palabras uniera los hechos, y pues está en duda su moralidad, la de el y la de todos en el Congreso y eso que apenas tienen dos meses que llegaron a ocupar una curul en la actual legislatura.