Ojo Visor: Jacinto López Cruz /Mar 18

Jacinto López Cruz
jaclop62@hotmail.com
(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)

Los saqueadores


Como un verdadero depredador de los bienes muebles e inmuebles del ayuntamiento de Macuspana, el ex-edil perredista Elías Alvarez Zurita (a) Rabito, acabó en menos de una semana con el terreno donde se asentaría el conjunto habitacional Siglo XXI, inmueble que fue comprado durante la administración de José Ramiro López Obrador, el hermano “incómodo” de Andrés Manuel López Obrador, por medio de un crédito que autorizó Banobras, pero que finalmente se convirtió en un elefante blanco, porque solamente se construyó un puente que atraviesa el rio Puxcatán, pero de la magna obra anunciada por el ex-alcalde perredista no se realizó porque los recursos económicos fueron desviados para otros fines.

Conocido ya en Macuspana como el mega fraude del año o robo del siglo, el consejo de administración del Instituto de Vivienda, integrado por los ex-funcionarios perredistas, Ernesto Priego López, director de Finanzas; Josefa Rodríguez Mondragón, directora de Programación; José Manuel Gómez Morales, director de Obras Públicas; Javier Palacios Priego, director de Asuntos Jurídicos; José Cruz Montero, secretario del ayuntamiento; José Alberto Hernández Pascual, secretario de Fomento Económico; Ramón López Guzmán, secretario de Administración; y Carlos Cerino Marín, director de Vivienda, así como el ex-presidente municipal, Elías Alvarez Zurita, en los últimos días de diciembre de 2009, realizaron la venta y donaciones de 31 hectáreas de terreno del total de la extensión del inmueble donde se asentaría el conjunto habitacional Macuspana Siglo XXI, que fuera comprado durante la administración de José Ramiro López Obrador por medio de un préstamo que Banobras le otorgó al ayuntamiento, deuda pública que ahora heredó el alcalde, Alfonso Pérez Alvarez, cuyo pasivo en éste momento asciende a 36 millones 035 mil 611 pesos, según lo declarado por el actual Sub-contralor, Rafael Concha Zurita.

Entre el 27, 28 y 29 de diciembre de 2009, el ex-presidente municipal, Elías Alvarez Zurita y los funcionarios de primer nivel de su gabinete que conformaban el Consejo de Administración del Instituto de Vivienda Municipal, realizaron 18 ventas y donaciones a particulares del terreno donde se realizaría el proyecto viviendístico siglo XXI, efectuadas de la siguiente manera; 14 hectáreas fueron vendidos a particulares, mientras que 17 hectáreas fueron “donados” en forma “caritativa” por Rabito a supuestas Asociaciones Cíviles, aunque la Vox Populi en Macuspana, señalan que las donaciones son prestanombres encubiertos de Elías Alvarez.

Todos los documentos de compra-venta y donaciones de ese inmueble fueron pasados bajo la fe pública de la Notaria 27 con sede en ésta ciudad de Villahermosa. El 28 y 29 de diciembre los recursos económicos que ascienden aproximadamente a 17 y medio millones de pesos como producto de la venta en partes del inmueble siglo XXI, fueron depositados a la cuenta bancaria del instituto de Vivienda de Macuspana, cuyo titular era el arquitecto Carlos Cerino Marín, cuya firma aparece en los documentos notariales como vendedor, pero extrañamente los días 30 y 31 de diciembre los recursos económicos son retirados, pese a que supuestamente serían utilizados para pagar parte de la deuda contraída con Banobras, apareciendo el uno de enero de 2010 solamente cinco mil pesos en dicha cuenta, y hasta ese día el responsable de las Finanzas de la administración perredista se negaba a entregar a la administración entrante toda la documentación bajo su responsabilidad, pues pedía tiempo para expedir cheques a nombres de particulares, lo que representaba el reparto del botín encabezado por Elías Alvarez.

La administración perredista dispuso entre compra-venta y donaciones de 31 hectáreas, del total de la superficie comprada por Pepín López para construir siglo XXI, cuyos recursos económicos (17 y medio millones de pesos) supuestamente serían para liquidar parte del adeudo con Banobras, pero mañosamente para desaparecer ese dinero, Elías Alvarez y sus colaboradores, entre el 30 y 31 de diciembre ingenian la licitación cinco obras públicas que las adjudican, las construyen, las inauguran y las cobran en 48 horas, por lo que desaparecen los recursos económicos millonarios que ya habían sido depositado a la cuenta del Instituto de Vivienda de Macuspana, lo que representa el hurto más burdo, absurdo y descarado que una administración municipal, en éste caso la perredista, haya cometido en los últimos años en ese municipio y que ahora es conocido como el robo del año o del siglo, por lo que seguramente le esperan días o semanas muy amargas a Elías Alvarez (quien ya quiere irse a Tenesse, Estados Unidos, a donde vive su hija) y su camarilla, pues el robo descarado al presupuesto público debe ser castigado con cárcel, a la vez que deben ser obligados a resarcir el daño patrimonial que le causaron al ayuntamiento de Macuspana, donde también están involucrados particulares y presuntos dirigentes de organizaciones civiles que recibieron las supuestas “donaciones”, dado que actuaron con conocimiento de causa al adquirir un bien inmueble de la comuna, justo cuando la administración perredista ya iba de salida, por lo que es evidente que también pretendieron obtener ganancias “ilegales” a rio revuelto por lo que no están exentos de responsabilidades penales, como se les debe de obligar a devolver los predios adquiridos de manera “legal”, pero indebida.

La relación de los nuevos dueños del terreno donde se asentaría el complejo viviendístico siglo XXI son los siguientes: los hermanos Rovirosa Gular (Pepe botana y hermanos) que adquirieron 25 mil metros cuadrados; Alejandro Morales León, 3 mil 288 metros cuadrados; Juan Herminio Mejía Santana, 3 mil 419 metros cuadrados; Jorge Alberto Goñi Arevalo, 2 mil 390 metros cuadrados; Leonel Alvarez Ocaña, 2 mil 264 metros cuadrados; Ovidio Bocanegra García, 3 mil metros cuadrados; César Augusto Pérez León, 6 mil 851 metros cuadrados; Alejandro Fabián León, 2 mil 140 metros cuadrados; Oscar Fernández Gallegos, mil 514 metros cuadrados; Arturo Torres Martínez, 8 mil metros cuadrados; Miguel Bouchot Mollinedo, 9 mil metros cuadrados; Bienvenido Priego Franco, 2 mil 276 metros cuadrados; Heriberto Antonio Gordillo Pech, 7 mil 480 metros cuadrados; Santiago Martínez González, mil 50 metros cuadrados; Saude María Luisa Bernat Ocampo, 20 mil 500 metros cuadrados; Santiago Martínez, 10 mil metros cuadrados; Jorge Vázquez Cancino, 44 mil metros cuadrados y Grupo Dilar, 10 mil metros cuadrados.

Mientras que a la Fundación Cultural y Educativa Cumbre, Asociación Civil, representada por José Luís Falcón Priego, y presunto prestanombre de Elías Alvarez le entregaron en donación 31 mil metros cuadrados, más de tres hectáreas de terreno, y a la Asociación para el Cambio y la Respuesta, Asociación Civil, (otro presunto prestanombre), representado por Abner Martínez Morales, recibió 32 mil 720 metros cuadrados (más de tres hectáreas de terreno), lo cual representa un fuerte agravio a las finanzas municipales, dado que el préstamo autorizado por Banobras con la que se compró dicho terreno lo sigue pagando el actual ayuntamiento que encabeza Alfonso Pérez Alvarez, por lo que los ex-funcionarios públicos encabezados por el ex-alcalde perredista Elías Alvarez y dos decenas de particulares atracaron el patrimonio municipal, por lo que el Organo Superior de Fiscalización del Congreso del Estado y el ayuntamiento de Macuspana, deben dar vista a la Procuraduría General de Justicia para que realice una investigación exhaustiva y los responsables no solamente vayan a la cárcel sino restituyan el patrimonio del ayuntamiento.

La honestidad valiente que pregona a lo largo del país Andrés Manuel López Obrador se ha hecho añicos en su tierra natal, donde su hermano Pepín López y sus seguidores resultaron verdaderos atracadores del erario público. Y pensar que contra ese tipo de lacras luchaba en el pasado el peje, pero ahora hasta los convalida.