La alternancia llegó para quedarse; un gobierno dividido
José Martínez
publicado en el Diario AVANCE Tabasco
En Tabasco la alternancia se consolidó no sólo con el triunfo de la oposición en el 2012, cuando se cortó por fin el predominio del Partido Revolucionario Institucional en el estado, sino la votación en este 2015 llevará a que a partir de enero del año próximo haya “un gobierno divido”, porque ningún partido tendrá mayoría en el Congreso, sostuvo el gobernador Arturo Núñez en una amplia entrevista por radio y televisión.
Explicó el mandatario tabasqueño que “si en el 2012 fue la culminación de la alternancia en los dos últimos municipios en donde no se había dado, Centro y Tacotalpa y en el Ejecutivo Estatal, la novedad del 2015 es que tenemos por vez primera, lo que los politólogos llaman un gobierno dividido o compartido, según la perspectiva desde la cual se analice; un gobierno en el cual un poder, el Ejecutivo, está a cargo de un representativo de una mayoría y otro poder en este caso el legislativo, pudiera estar a cargo de otra mayoría”, que no la hay, que se tiene que construir. “Esto hace que haya un reto mayor todavía para construir acuerdos”.
Recordó que “en el pasado hubo dos momentos donde (…) la oposición del PRD tuvo en un momento determinado la mayoría de la mitad más uno sobre el partido en el gobierno, lamentablemente se abortó la posibilidad de experimentar (un gobierno compartido), porque operaron mecanismos de compra de diputados para decirlo de una manera clara y abierta”.
“Ahora –dijo Núñez- no hemos estado en esa línea, respetamos la decisión de los tabasqueños de conformar un Congreso plural. Por lo que toca al Ejecutivo, estoy listo y dispuesto a hacer mi parte en la construcción de acuerdos y evidentemente hay un reto para las fuerzas políticas para hacerlo en el propio Congreso”.
Sostuvo el mandatario que el hecho de que no vaya a tener su gobierno una mayoría en el Congreso local “no es un momento dramático o complicado”. La experiencia de estos tres primeros años ayuda y porque Tabasco no es el primer estado con gobierno dividido hace prever que “habrá racionalidad política”.
Inclusive a nivel nacional “los gobiernos divididos empezaron propiamente en México con Vicente Fox, aunque desde el segundo trienio de Ernesto Zedillo el PRI perdió la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados”. Fue precisamente al actual gobernador de Tabasco a quien correspondió coordinar a ese grupo parlamentario del tricolor.
Así “a partir del años 2000, no hubo la mitad más uno de nadie en particular, ni en diputados, ni de senadores; desde entonces a la fecha los mexicanos han ratificado que no quieren una fuerza dominante en ninguna de las cámaras, sino que haya pluralidad, pero que se corresponda con acuerdos”. Esto es, la pluralidad no debe ser caos, inestabilidad, irresponsabilidad y ofensas, sino una sociedad con capacidad para gobernarse.
Sin duda que Arturo Núñez tiene razón. Aunque desde principios de los años noventa el PRI empezó a perder la mayoría en las presidencias municipales y que era posible que el tricolor retornara con fuerza en el 2015 por la división de las izquierdas, lo que tuvimos fue una votación que repartió los ayuntamientos en cinco partidos y las diputaciones en siete partidos. Esto significa que en el 2018 ninguno de los partidos podrá decir que es dominante. Aunque el PRI regresara ya no será la misma fuerza de antes. ¿La izquierda?, ya veremos si tiene capacidad para las alianzas.
Haberes
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