martes, 19 de febrero de 2013

TRANSPARENCIA POLÍTICA / Erwin Macario / Columna / El Pacto / Feb 19


Publicado en el Diario Rumbo Nuevo

El Pacto
Si bien sabía que iba a
entrar a zona de desastre,
no tenía idea precisa del
desastre hasta que lo recibí.
Arturo Núñez 110213

Reconciliación del Tabasco dividido desde hace más de 20 años, la pasada reunión de todos los partidos políticos con representación en esta entidad federativa y el gobernador Arturo Núñez Jiménez es una muestra de que se puede unir de nuevo a los tabasqueños.
La firma del acuerdo político por Tabasco entre ANJ y los dirigentes del PAN, PRD, PRI, PVEM, Movimiento Ciudadano, PT y Panal, es ya un hecho histórico, pero no la solución definitiva de los problemas de Tabasco, para ello se necesita que todos los tabasqueños vean para adelante.
Que, como lo dijo el mandatario estatal ese día lunes 11 de este mes, busquen evitar divisiones. Saber que la alternancia es la oportunidad, para todos, de rehacer las cosas.

No andar haciéndose acusaciones mutuas. “Eso nos podría dividir. Simple y sencillamente recojamos el hecho que durante 23 años no se dialogó y que a partir de ahora todos tenemos el espíritu de hacerlo. Concretémonos en bien de Tabasco. Simple y sencillamente veamos para adelante”, dijo Arturo Núñez a los partidos así como a funcionarios y políticos que asistieron al encuentro en el que se puso en marcha la agenda por ese pacto político.
Si no hay que andarse dividiendo por sospechas o intrigas partidistas, también hay que reconocer que si bien antes se había intentado un acuerdo similar durante los últimos gobiernos priístas, hay que reconocer que la negativa del PRD a sentarse en la mesa en esas circunstancias había impedido todo acuerdo.

Esta vez, aunque a regañadientes, el PRI aceptó acudir a la mesa del diálogo y debe mantener esa posición de respeto a los de enfrente, como el PRD tiene que dar muestra de tolerancia así como apoyar al gobernador, pues éste llegó en base a su plataforma política y a la de los otros partidos que con él fueron en fórmula electoral.

El exhorto de Núñez a todas las fuerzas políticas se dio con el conocimiento, por él recalcado, de que van haber turbulencias políticas en el camino. “Vamos a tener que proceder contra quienes saquearon el estado y ojalá y esto no se advierta —porque no es, en modo alguno, mi intención— como un ajuste de cuentas partidarias. No concibo así la alternancia. La alternancia la concibo como lo estamos diciendo aquí”, puntualizó ANJ.

Por suerte, en Tabasco hasta el propio PRI tiene conciencia de que la ley está por encima de cualesquier intereses de grupos políticos, personajes de la vida política tabasqueña y de los mismos partidos.

Si quienes resulten responsables de delitos contra el patrimonio de Tabasco son del PRI, en ningún momento puede argumentarse la sujeción a proceso penal contra alguno de ellos para amenazar con quitarse de la mesa del diálogo que ha empezado.

Tampoco es lícito, moral y sí muy grave, que el mismo PRD presione con demandas de castigo que está bien visto son del propio interés del mandatario que el mismo día que asumió el poder como gobernador dijo que “a esos no les espera el disfrute de rentas mal habidas. Les espera todo el peso de la ley, la cárcel”.

La confianza con la que Núñez llegó a la gubernatura quienes menos la deben poner en duda son los líderes y dirigentes perredistas.

Entender que, como él mismo lo dijo, si ya se ha llegado al punto de arranque en la reconciliación de Tabasco, con el mismo empeño en que han contribuido todos los partidos a construir la agenda del pacto, se pase ahora a la parte más importante: desarrollarla y cumplirla.

El bono democrático depositado el 1 de julio, se dio por y para todos los tabasqueños para replantear la vida pública, la vida institucional. Es el turno de que las cosas se hagan diferentes, aunque con el liderazgo de un político que llegó con las siglas de la izquierda.

“Sí es, a los que fuimos ungidos por el voto popular —dijo ANJ en la firma de la agenda del Pacto— nuestro turno para hacer las cosas, pero tenemos que hacerlas mejor, porque sean diferentes; no para que vayamos a repetir los vicios del pasado que a nadie nos conviene”.

Muy cuidadoso fue Núñez al dejar claro que no le lleva el ánimo de polemizar en una mesa del diálogo entre las fuerzas políticas tabasqueñas, sino tan sólo fijar la posición del gobierno que encabeza.

En un acto de responsabilidad y de aceptación de circunstancias, Arturo Núñez también expresó que va a cumplir sus compromisos de campaña, pero no en detrimento de las finanzas de Tabasco. Esto deben entenderlo todos.

Y sobre la situación de desastre en que halló Tabasco ofreció pronto dar cuenta a los tabasqueños del monto del adeudo, del presupuesto comprometido, del déficit, de los faltantes, todo lo que lo obliga a ser responsable en el mando gubernamental.

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