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(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)
Tristezas tabasqueñas (¡Hola Gaba! (I)
Desde hace unos días me encuentro con el ánimo decaído, asaz apesadumbrado. Pienso en los más de 3 mil trabajadores burócratas que fueron echados.
Rememoro aún con mi apaleado ánimo a los "dones" J. Claro García y Cecilio Cupido, que en el colmo de su inmenso talento, dieron a la posteridad dos piezas excelsas: "Tristezas tabasqueñas", un hermosísimo vals con el que hoy encabezo mi espacio y "Mis Blancas Mariposas".
No es que este columnista esté en contra del adelgazamiento de la nómina del gobierno, para nada. Estaría en todo caso contra las formas. Resiento en el alma que hermosas amigas como Paquita Guzmán, que empezó siendo una chiquilina su trabajo profesional entregada a todos los gobiernos que llegaron a Palacio, esté fuera al igual que muchos.
Todos recuerdan cuando casi niña llegó con don Mario Trujillo. A pesar de esos incontables años de entrega, Paquita ya no estará más.
También deploro que un amigo tan allegado al poder, Manuel Morales, (a) Clark Kent, que a sus 60 años fue aún capaz de graduarse como licenciado en Periodismo, esté fuera de lo que forma en gran parte su historia personal.
Cuando alguna vez colaboré con un gobernador, en tiempos de don Salvador J. Neme, me encontré ahí a una chava, Lupita Acosta, con la que trabé una amistad hermosa y transparente.
Madre de una beba de unos diez años en aquella época, Lupita era (es) para mi el epítome de la madre soltera luchona, eficiente e inteligente.
Una circunstancia infeliz, la quiebra financiera del estado la tiene, al igual que a más de 3 mil 400 más, en las largas filas de los desempleados.
Su drama, el drama de muchísimos, me duele.
Sé que el régimen no podía tolerar más las interminables fugas de dinero, pero ¿era esa la medida (de echarlos) la mejor? No estoy de acuerdo tampoco con las palabras que pronunció Arturo Abreu Ayala, director del CADEM, a quien le parece que la medida gubernamental es para "modernizar" las instituciones.
Eso no es modernizar, Arturo. Entiendo tu necesidad de quedar bien con tus jefes, pero el 8 de mayo no estuviste acertado. Mucho menos cuando fuera del gobierno nuestros empresarios, una clase acomodaticia, vividora y especuladora, sin compromiso alguno con Tabasco, no está capacitada para asimilar la violenta salida de miles de cesantes.
Por eso hoy --lector lectora-- mi espíritu se niega al silencio. Quisiera, aunque sea mínimamente, ser solidario con los que a partir de la semana pasada están en la calle junto a sus familias… LA CONTRA de "modernizar": "Himno triunfal/ canta Tabasco y es su luz,/ luz inmortal/ que da su cauce plenitud./ Alza su voz/ que es de trabajo y libertad/ y es un ejemplo/ en el estadio nacional./ Para cantar/ a mi Tabasco he de encender,/ todo el caudal/ de luz que de el amanecer./ Porque al cantar/ dice por mi el conquistador/ es esta la tierra/ la mejor que alumbra el sol"…
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