Primera cosecha de miel, en riesgo
Plaga de escarabajos diezman cosechas
ESCARCEGA, Cam., 8 de enero.- A tres semanas de iniciar la primera cosecha de miel de este año, productores apícolas libran una dura batalla para erradicar de sus apiarios una plaga de escarabajos que atacan directamente a las colmenas y devoran a las crías, lo que representa una seria amenaza para esa actividad económica, reveló el productor Guadalupe Chablé Salazar.
Indicó que hasta hace poco estaban sufriendo también por una plaga de ácaros, la cual fue combatida de manera orgánica con la utilización de semillas de una planta endémica de la selva, la cual actúa como un repelente natural que fue muy efectiva con los ácaros, pero al escarabajo no ha sido podido posible controlarlo, a pesar de que se ha empleado toda clase de remedios para erradicarlo o ahuyentarlo.
“Los embates de los escarabajos a los apiarios comenzaron desde hace dos años en la región de Calkiní, pero lamentablemente ya lo tenemos aquí, causando serios daños a la actividad, ya que una vez que invade las colmenas se mete en las celdas y comienza a comerse a las crías de las abejas, lo que ha mermado la población al hacer cada vez más y más débil a la colmena, hasta hacerlas desaparecer”, indicó.
Explicó que las abejas no pueden defenderse porque son insectos más grandes y acorazados, lo cual ha causado gran impacto, porque muchos apiarios se han acabado por el escarabajo, pues donde antes había 75 o 100 colmenas, actualmente les sobreviven 20 o 25, y desgraciadamente hasta ahora no han recibido apoyo de ninguna dependencia de gobierno.
Recriminó que a la fecha no le hayan hecho caso al problema, a pesar de que eso afectará seriamente la cosecha de enero de tajonal, pues se requiere de toda la asesoría y ayuda posible para erradicar esa plaga, ya que ellos saben de antemano que tienen que cuidar mucho los apiarios y no pueden usar insecticidas, ni pesticidas.
“Si usamos alguna clase de químico que pueda matarlos corremos el riesgo de contaminar la miel y al venderla la analizarían y rebotarían; incluso, no podemos siquiera decir que le vamos a poner vitaminas para que se defiendan un poco porque ya se va a cosechar y las mismas vitaminas contaminan la miel, de modo que tenemos que aguantarnos hasta que se nos oriente sobre un posible control biológico”, aseveró.
Mencionó que el año pasado en los centros de acopio reconocidos se les pagó a 34 pesos el kilogramo de miel, en tanto que los “coyotes” pagaban hasta los 35 pesos, pero a peso “muerto”, es decir, sin volverlos a ver, ni hacer compromiso alguno con ellos, como sí lo hacen los enlaces de Miel y Cera de Campeche, que en las épocas difíciles los apoyan con dos o tres bultos de azúcar.
“Podríamos luchar por mejores precios, pues en Escárcega habemos unos 600 productores apícolas, aunque lamentablemente cada quien se defiende como puede, ya que no estamos organizados, y eso es precisamente lo que aprovechan los coyotes para pagar barato, ante la incapacidad de importar desde este lugar al extranjero”, concluyó.
(Texto y fotos: Martín Contreras)
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