Para Usted
El poder termina, el recuerdo nunca
Mario Gómez y González
La experiencia, desgraciadamente, ha sido siempre ingrata y dolorosa para el gobierno estatal (desde la óptica de su autoridad como tal); de Tabasco y, por supuesto, de los tabasqueños.
Siempre que un gobernante trae a funcionarios de fuera, al terminar el periodo se van del estado, pero no con las manos vacías; se van inmensamente ricos y cargados de dinero, propiedades y demás bienes materiales; engordadas sus cuentas bancarias y las de sus familiares y prestanombres.
“Vienen a robar”, me asegura un político y funcionario de alto nivel que conoce las entrañas del poder público y de la administración pública estatal. Y me puso un ejemplo que dio mucho de qué hablar años atrás.
En tiempos de don Enrique González Pedrero, vino a Tabasco como titular del entonces CODEURTAB (Coordinación para el Desarrollo Urbano de Tabasco), un señor de nombre Carlos Campos Campos, pariente directo de la ex primera dama, Julieta Campos de González Pedrero (QEPD), quien vivió en esta capital tabasqueña como verdadero “Jeque Árabe” y se fue “cargado de billetes”.
Quienes lo conocieron de cerca, cuentan, me sigue diciendo mi informante, que, en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, Carlos Campos, adquirió propiedades y se mandó a construir o compró (no me precisó bien el dato), una enorme y lujosa residencia con los mejores materiales y acabados; exquisitamente amueblada y equipada, misma que años después puso en venta, pero a condición que se la pagaran en dólares.
Fueron un grupo de funcionarios, a quienes un periodista local de aquellos años (creo que fue don Ignacio “nacho” Rodríguez Castro), los bautizó con el mote de “los extra estatales”; saquearon con singular regocijo las arcas de Tabasco y se fueron de aquí, para nunca más volver; vaya, como el jibarito, “locos de contentos, con sus cargamentos”.
Eran tiempos en que el dinero fluía como verdaderos raudales a las arcas de la Secretaría de Finanzas de Tabasco; una, porque la lucha que por las participaciones petroleras luchó y consiguió el ex gobernador Leandro Rovirosa Wade (QEPD), pero que, finalmente, vino a disfrutar totalmente Enrique González Pedrero y, la otra razón del mucho dinero que hubo, fue que, en la Secretaría de Programación y Presupuesto, despachaba Carlos Salinas de Gortari (más adelante, Presidente de México), pero que tenía relaciones amistosas al más alto nivel con “El Maestro, Enrique”, lo que le valió a la entidad recibir “carretadas” de dinero.
Con Arturo Núñez Jiménez, llegaron a Tabasco, Amet Ramos Troconis, pariente cercano a Martha Lilia López Aguilera de Núñez; y Bertín Miranda Villalobos: ambos, nunca se integraron a la sociedad tabasqueña, porque no conocían a nadie y desconfiaban de todos los chocos; no conocían la realidad ni la idiosincrasia de los criollitos; en pocas palabras, vinieron a la aventura y “a ver que se llevaban”, cargando con todo a la conclusión del anterior periodo.
No dejaron inversiones en Tabasco; no dejaron amigos, pues nunca les interesó el interactuar con los tabasqueños, a quienes siempre consideraron inferiores y “aldeanos”; les tuvieron que rentar y pagar sus residencias donde vivieron éstos últimos seis años; se fueron como “las chachas”, por la puerta trasera, pero, ¿eso que importa? si las toneladas de dinero, ya estaban en sus cuentas bancarias.
Vaya, ni sus honras, si es que la tuvieron, les dejaron a los tabasqueños, porque, insistimos, nunca tuvieron el compromiso de trabajar y sumarse al esfuerzo de este noble pueblo por salir adelante; podemos estar seguros que, por su gusto, no regresarán a Tabasco…insistimos, por su gusto, pero si de verdad hay la intensión de combatir la corrupción y la impunidad, probablemente vengan a vivir a un inmueble de la colonia INDECO, pasando el puente de “la pigua” y la ciudad industrial, para mejores señas de ubicación.
En Tabasco hay talento local para despachar en cargos de primer nivel en las instituciones del gobierno estatal; hay grupos de posgraduados que se prepararon académicamente para servir a la entidad y están a la espera de una oportunidad laboral; hay empresarios y profesionales de la sociedad civil, que bien podrían aportar su talento para sacar adelante a la entidad. El poder se acaba, pero el recuerdo nunca.
Y Para Usted También**El comalcalquense, Jesús “chucho” Alamilla Padrón, rendirá este día protesta como nuevo Director de Evaluación y Control del Congreso del Estado de Tabasco, a las 10:30 de la mañana**se trata de un tabasqueño por los cuatro costados y de profesión Licenciado en administración de Empresas (LAE), que ama a Tabasco y seguro estamos aportará su amor y talento en esta nueva encomienda**felicidades y suerte Chuy**fue todo por hoy**hasta mañana Dios mediante.
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