jueves, 16 de junio de 2011

Transparencia Política: Erwin Macario Rodríguez / Columna / Jun 16

(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)
* erwinmacario@hotmail.com

Gina y el Madrazato

…hay de todo. Lo mismo hay compañeros
hombres que se sienten orgullosos que haya
mujeres que participemos y nos ayudan, no
impulsan, nos aconsejan y nos estimulan
para seguir adelante, como hay quienes se
sienten celosos de que entremos al Club de Tobi.
Gina Trujillo / entrevista de Alejandro Pérez-García /
Revista Estrategia política 150211

La llegada de Humberto Mayans Canabal, Arturo Núñez Jiménez, Gina Trujillo Zentella o Luis Felipe Graham a la gubernatura restablecería la línea sucesoria en la política tradicional de Tabasco, rota por el gobernador Roberto Madrazo Pintado hace dos sexenios, lo que censuró uno de los actores políticos al señalar que la herencia política se daba al caballerango, al criado y no al heredero natural.

La causa de esa ruptura histórica y política: la ambición de la familia Madrazo.

Roberto Madrazo había llegado al poder en circunstancias parecidas a las de su padre, Carlos Madrazo Becerra. Éste preparó su llegada con un golpe al gobernador Manuel Bartlett Bautista, sustituido por el general Miguel Orrico de los Llanos. Aquel fue uno de los cabecillas que orquestaron la traición al gobernador Salvador Neme Castillo y la gubernatura sustituta de Manuel Gurría Ordóñez para prepararle su llegada.

Ambos, padre e hijo, pretendieron instaurar un madrazato, que en el caso de don Carlos hubiera facilitado la llegada de Gurría Ordoñez y la de Roberto así como, tal vez, cambiado el acontecer político tabasqueño. El gobernador Manuel R. Mora frustró la ambición madracista.

Por su parte Roberto falló al no tener un aspirante fuerte a la gubernatura. Los dos aspirantes con mayores posibilidades eran Humberto Mayans y Arturo Núñez, ninguno dispuesto a . Intentó revivir el sueño de su padre pero su candidato, Manuel Andrade Díaz, mantuvo la sana distancia con el ex mandatario.

En vísperas del cambio de gobierno, aunque sin la fuerza de antes y bajo la sospecha de poder ser uno de los ex gobernadores en los que el PAN mostraría la corrupción priísta, Roberto Madrazo intenta restablecer la sucesión hereditaria que el PRI ha mantenido en Tabasco, pero haciendo a un lado a los que como Mayans, Núñez, Gina Trujillo o Graham están en la lista de espera interrumpida por la imposición de Andrade y el triunfo electoral de Andrés Granier Melo, que sin estar en la línea sucesoria arrebató el poder merced a un trabajo que le llevó con la más alta popularidad al gobierno tabasqueño.

La nueva ficha del madrazato es Federico, el nieto de don Carlos —cuyos mayores méritos son ser hijo y nieto de gobernador y empleado del aspirante a la Presidencia de la República enfrentado a Peña Nieto.
Federiquito intenta revivir un grupo que el mismo padre destruyó desde su gobierno. La disputada Fundación Carlos A. Madrazo sería el instrumento, pero Alfonso Izquierdo no suelta la franquicia. “A ti te puede correr hasta Andrés Granier, pero a mí nadie me quita el registro de la Fundación, es mío”, dijo a un político que medio en serio, medio en broma le preguntó cuándo le daba esa agrupación al hijo de Roberto.

Y es cierto. Es el diputado Izquierdo el que se ha dado el lujo estos dos años de traer, contra la voluntad de Roberto Madrazo, a los oradores en el acto en homenaje al llamado Ciclón del Sureste. El propio destape de Federico como candidato a una diputación local, al anunciarse la asunción a la fundación de su abuelo, se frustró el 4 de junio pasado. Otra vez falló la plataforma de lanzamiento en que han convertido el cadáver de Don Carlos.

No obstante, quien resulte candidato del PRI a la gubernatura de Tabasco, tendrá que enfrentar las ambiciones del grupo neomadracista y de Federico. Quien podría tener más problemas sería Gina Trujillo a quien ligan a Madrazo cuando en realidad ella ha trabajado con varios gobernadores desde que Manuel Gurría y Pedro Joaquín Coldwell le dan la oportunidad de incursionar en la administración pública como titular de Turismo estatal y la delegación federal; y el propio Roberto la apadrina políticamente, primero con la presidencia de la Fundación Colosio, después con el primer cargo de elección popular. Gina Trujillo fue la primera mujer presidenta municipal de la capital del estado, Villahermosa. Y, después, la primera senadora por Tabasco.

Su amistad con Madrazo —que ella no niega, como tampoco la que tiene con otros ex gobernadores, con los que ha trabajado, entre ellos Manuel Andrade— no es su principal problema sino el que ella define como el Club de Tobi.

Pareciera que en Tabasco se intentara mantener vigente aquella Ley Sálica que en Francia databa del siglo V, con el rey Clodoveo I y fue revivida en 1713 para impedir el acceso a la mujer al reinado, “un nuevo reglamento para la sucesión de esta Monarquía, por el cual, á fin de conservar en ella la agnacion rigurosa, fuesen preferidos todos mis descendientes varones por la línea recta de varonía á las hembras y sus descendientes”.

Y esto cuenta para partidos como el PRD, donde Rosalinda López Hernández es la otra mujer aspirante a gobernadora. Queda en el tintero.

LADO CLARO

Restablecer las reglas políticas, la ortodoxia del poder, con un candidato de unidad, vendría a fincar bases para la paz y la tranquilidad públicas en Tabasco.

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