miércoles, 8 de agosto de 2012

PIQUETE / Martha Osorio Broca / Columna / Las décadas perdidas / Ago 08

Publicado en el Diario de la Tarde

Las décadas perdidas
Durante muchos años en los medios de comunicación se promovió con grandes titulares, voces engoladas e imágenes atractivas, las cantidades millonarias que se estaban invirtiendo en el estado para impulsar su crecimiento económico. Se promovía al territorio tabasqueño como tierra de oportunidades para todo el que quisiera invertir en el. Se promocionaban sus bondades que provocaba que inversionistas vieran en “montón” a invertir en el edén. 

Y, lo único que nos trajeron fueron plazas comerciales y súper mercados. Empresas que en su mayoría no dejan ganancias al estado, generan muy pocos empleos, que para colmo abusan de la necesidad del trabajador; empleados que laboran entre 10 y 12 horas al día, con bajísimos sueldos. 

La autoridad laboral no ve, ni oye. La CTM, al igual que la FTOT, son federaciones de sindicatos que sólo sirven de trampolín a sus dirigentes para ocupar cargos en las altas esferas políticas y para enriquecerlos. A propósito ¿existe toda vía la CROC?

 ¡Pero bueno!, volvamos al caso de la pobreza que existe y la parálisis económica que se vive.

Se les olvido a los gobernantes y funcionarios su compromiso con la gente, ¡con el pueblo! Dicen muchos ciudadanos. Quizá; opinan otros, se debió a que encontraron la formula mágica de obtener el voto que los llevó a ocupar cargos, que les permitieron por siempre y para siempre, resolver sus problemas económicos, el de sus familias, compadres y amigos.

 La formula es sencilla: en tiempos electorales, basta con repartir pollitos, láminas, despensas, gorras, camisetas y comprar del voto el día de la elección. En fin, lucrar con el hambre y la necesidad, es un negocio rentable.

Ante la pobreza que se vive, la pregunta obligada es: ¿Dónde están todos esos recursos millonarios que contenía cada bolsa de los programas gubernamentales? !Bueno! eso es lo que anunciaban.

Esas inversiones no se vieron, ni se ven. El campo tabasqueño luce pobre, abandonado y para colmo altamente contaminado. Las aguas antiguamente ricas en productos que alimentaban a los moradores de sus riveras y además les significaban fuente de ingresos económicos; hoy sólo están llenas de aceite y pez diablo. La brutal contaminación de Pemex, ha matado la mayoría de las especies y convertido a los pescadores en mendigos.

Este Tabasco pobre, con una sociedad harta de tanta mentira, es la que, más que depositar un voto el primero de julio a favor de Don Arturo Núñez, para gobernador, deposito su esperanza en él.

PIQUETITO.- El día de ayer cumplió un año más de vida la apreciada maestra Candita Victoria Gil Jiménez, ex rectora de nuestra máxima casa de estudios; nuestros mejores deseos y un abrazo.

Comentarios al correo: osoriobroca@yahoo.com.mx

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