(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)
La 'cannabis' (chín), pal'otra
Dentro de la aplastante derrota de los demócratas en la elección de 28 gobernadores en EU, destaca la victoria de un viejito de apellido Brown sobre los republicanos.
Esto en California.
Viejito y todo, Mr. Brown --dicen-- es político de avanzada. No de avanzada edad, sino de auténtica vanguardia, y dos, que junto a su victoria llegó también la derrota para la mariguana, a la cual los electores le hicieron el feo. Esta sería una derrota temporal para la "cannabis", porque al paso que va, no dude que en poco tiempo contará con los votos suficientes para legalizarse (Ah, maldita cannabis, cuántos crímenes se han perpetrado en tu nombre y tú, como el "Jhonnie Walker", como si nada). Por otro lado, en Jalapa, parece ser que ya empiezan a surdir los demonios negros del terror. Y esos demonios, compadre, parecen no ser de ahí. En esa plácida ciudad que hoy gobierna Luis Francisco Deyá Oropesa, el pasado lunes 1º de diciembre por la noche, una afligida voz femenina, cuyo nombre guardo porque en este estado cualquier información puede ser usada en tu contra, me llamó muy angustiada a mi celular. Según su relato, durante ese día, efectivos de la Policía Estatal (Eso quiere ella creer), realizaron presuntamente un "simulacro anticrimen", en el que hubieron incluso hasta disparos (en mi investigación, uno de mis relatores contó hasta 30 disparos de arma automática; otra me indicó que fueron solamente dos y hubo uno que hasta vio que hubo fuego cruzado. Unas horas después del evento, algunos policías de ese escuadrón pidieron disculpas porque --les aseguraron a algunos-- estaban llevando a cabo una maniobra de entrenamiento de un "grupo de élite antiterrorista", sólo que se les pasó la mano: UNO: Porque no se alertó a la población para que no saliera de sus casas y a muchos los agarró en plena calle. Incluso familias con miembros de la tercera edad, que salen a la banqueta a tomar fresco vespertino, fueron aterrorizados porque en Jalapa, para empezar, no pasa nada y de repente, ¡les armas un desmadre! Obviamente, se asustan…
DOS: Ese día, cuenta uno de los narradores, los "vende-dulce", los "vende-panucho" y empleaditas de los comercios del centro, al escuchar los disparos (presuntamente de salva), aparte de embarrar histéricamente hasta la lengua en el suelo, entraron en verdaderas crisis de nervios…
TRES: Alguien incluso señala que don Pepe Herrera, que siempre se ha portado machín en la situación más cabrona, tuvo un acceso de "arritmia" que pudo haber degenerado en algo mucho peor…
CUATRO: Pero hubo alguien que asegura que tal grupo de élite estaríase preparando en un rancho (Las Carolinas) propiedad de un tal Manzur en San Miguel de Afuera. Que son unos 30 y de esos tantos, 22 son de la ranchería Calicanto; que los acompaña, o han visto que una gringa --presuntamente periodista del New York Times--, los acompaña y los filma… NOTABENE: Pobres jalapanecos, sin dinero y con la inseguridad encima. Ta'cabrón…
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