Transparencia Política: Erwin Macario Rodríguez / Columna / May 30

(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)

Hay nivelitos

Que razón tiene el gobernador cuando
asegura que son los electores los que
decidirán, pues él lo sabe, que no hay
otro camino para legitimar una elección
que el ejercicio del voto, como arma del
ciudadano para elegir a un gobernante y
el gobernador en turno deberá transmitirlo
a quien convenza al pueblo

erwinmacario@hotmail.com

Las declaraciones del gobernador Andrés Granier, después de los idus de mayo, en el sentido de que no tiene candidato a la gubernatura de Tabasco, solamente corroboró la confirmación de la regla, pues en la ortodoxia política priísta ningún aspirante renuncia a un cargo de Gobierno si no tiene luz verde para avanzar.

Considerado candidato de línea por su relación casi filial con el gobernador Granier, del que Mayans es amigo desde la infancia y compañero de juventud, su separación de la responsabilidad de la política interna en el gobierno estatal se tomó como el paso necesario para consolidar su oferta política hacia el electorado tabasqueño, el reforzamiento del PRI y de la política del propio mandatario estatal.

En realidad, en Tabasco no se puede ofertar únicamente al candidato, por más que, como en el caso de Mayans, se le considere con las tablas políticas suficientes para sacar adelante una campaña electoral, pues pese a que algunos quisieran recriminarle su paso por el PRD —donde tuvo destacada participación nacional— su desempeño como funcionario de gobiernos priístas, como el de Enrique González Pedrero y la tarea que desempeñó como dirigente estatal del PRI no pueden borrarse de un plumazo.

Pero ganar una gubernatura no es trabajo de un solo hombre. Por eso se piensa que los tiempos —antes de la campaña electoral conforme a la ley— permiten que se refuerce a un PRI que no tiene la fuerza suficiente para lograr el triunfo electoral con cualquier candidato, así como se tiene que mantener la unidad en torno al gobierno de Granier. Partido fuerte y gobierno fuerte pueden ayudar mucho al candidato.

Las declaraciones de Granier buscan calmar las aguas de la política, aunque algunos quisieran enturbiarlas. Claro que también deja trompo vivo.

Ayer, por ejemplo, la prensa documentó de nuevo la presencia en los medios de dos aspirantes fuertes a la candidatura priísta, Luis Felipe Graham Zapata, secretario de Salud y Jesús Alí de la Torre, presidente municipal de Centro. El primero publicitando sus campañas de salud; el segundo retratándose junto al ex gobernador Enrique Priego Oropeza, al que entregó reconocimiento como ciudadano distinguido. EPO es parte de un grupo político poderoso.

Pero creer que Granier, a estas alturas, no tiene candidato, también mantiene vivos a otros políticos que pueden hacer la chica, como el líder del Congreso, José Carlos Ocaña Becerra; o a Gina Trujillo quien, dentro de la ortodoxia, insisto, está, junto con Mayans y Arturo Núñez Jiménez, en la línea sucesoria que Roberto Madrazo rompió imponiendo a Manuel Andrade como su sucesor. Aunque Arturo ya está enfrente y es el más seguro candidato que el PRD postularía contra el candidato priísta. Rosalinda López, es la segunda aspirante en ese partido.

Otros aspiran y suspiran, pero hay que entender que en la política “hay nivelitos” y no se puede caer en los sueños guajiros como los de Addy García, que de nana de Federiquito Madrazo ahora quiere ser diputada local; o de un funcionario de Macuspana que se hizo publicitar como aspirante fuerte a la alcaldía de ese municipio, basándose en la reunión que sostuvo con Cuco Rovirosa “en conocido café de Galerías, en Tabasco 2000”.

Dicen que Cuco le recalcó “cuan importantes son los votos y como lograrlos en todos los sectores” y también le recomendó “que no se pelee con nadie”.

La recomendación de Cuco, eso sí, vale para el proceso de selección del candidato del PRI a la gubernatura. Humberto Mayans, el único que está ya fuera de cargos públicos y como ciudadano camina en pos de su postulación es el que más debe cuidar esto.

En tanto el tiempo electoral permite la candidatura y la abierta campaña, hacia el interior del PRI y en la relación con el Gobierno estatal, Humberto Mayans continúa su política de respeto a los otros aspirantes, que si bien tienen que ser derrotados internamente, no deben ser lastimados ante la opinión pública porque nadie en Tabasco ignora que en el PRI tiene que llegarse a una candidatura de unidad en la que haya consensos y reparto de posiciones políticas entre todos los aspirantes y sus principales colaboradores. No hay que pelear con nadie.

LADO CLARO

Los aspirantes tienen que mantener la calma y la unidad en torno a las decisiones del gobernador. Es tiempo de consolidar la fuerza del PRI y del Gobierno pues escogerán quienes servirán en el proyecto 2012.