Fuente: Azteca Noticias / Notimex, 23 de noviembre de 2010, 15:25 hrs.
“Lo que pasó anoche fue un ataque militar no provocado contra personal militar coreano así como civiles”, indicó el funcionario, quien expresó sus condolencias a los familiares que perdieron seres queridos en el ataque.
Indicó que Estados Unidos apoyará una respuesta “mesurada y unificada”, que incluye el trabajo con sus aliados, incluido China.
Señaló que el enviado estadounidense a Corea del Norte, Stephen Bosworth, no ha descartado un futuro acercamiento con Pyongyang, pero que se hará de una manera unificada.
“La conducta de Corea del Norte ha sido muy mala, provocativa y beligerante. Y, nuevamente, no vamos a caer en este ciclo de premiar esa clase de conducta”, recalcó.
El vocero adjunto de la Casa Blanca, Bill Burton, señaló por su parte que el presidente Barack Obama “está indignado” por las acciones de Corea del Norte y que Estados Unidos estará “hombro a hombro” con su aliado surcoreano.
Informó que el mandatario tiene previsto “pronto” en algún momento una conversación con el presidente surcoreano Lee Myung-bak.
Agregó que Obama considera que Pyongyang “no está cumpliendo sus obligaciones y debe cumplir las que suscribió en el Acuerdo de Armisticio y en la ley internacional”.
En una declaración emitida esta mañana por la Casa Blanca, el vocero presidencial Robert Gibbs condenó “enérgicamente” el ataque.
El ataque contra la isla Yeonpyeong fue la respuesta de Pyongyang a la negativa de Seúl de detener las maniobras militares que conducía en sus aguas adyacentes en el Mar Amarillo.
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