jlggutierrez@hotmail.com
ABERRANTE DECISIÓN FAMILIAR
Salvo
pruebas en contra, el presidente del Consejo Administrativo del Club de Beisbol
Olmecas, Carlos Elías Dagdug Martínez,
y sus hijos Juan Luis Dagdug Nazur y
Carlos José Dagdug Nazur están flagrantemente conculcando no sólo la Ley de
Responsabilidades de los Servidores Públicos estatales, sino la propia
Constitución Política del Estado de Tabasco.
Ilegalmente
Dagdug Martínez nombró como
Presidente Ejecutivo del Club Olmecas a Juan
Luis Dagdug Nazur, y como responsable de Operaciones Deportivas y
Financieras del mismo equipo de beisbol a su otro consanguíneo, Carlos José Dagdug Nazur, al ser éste designado titular del Instituto del Deporte del Estado
de Tabasco (INDETAB), el pasado 31 de diciembre.
Es el
mismo gobierno que también sostiene desde hace años a toda la burocracia del
INDETAB.
Por
ello sorprende e indigna a la comunidad deportiva y a la fiel afición del
llamado Rey de los Deportes que siendo licenciado en Derecho y fedatario, don Carlos Elías Dagdug Martínez haya hecho
caso omiso de nuestra Carta Magna y de las leyes secundarias que prohíben
rotundamente la práctica del nepotismo, y que el propio gobernador, Arturo Núñez Jiménez, condenó
enérgicamente en su espectacular y brillante toma de protesta.
El
artículo 47 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del
Estado de Tabasco dice: “Todo servidor público tendrá las siguientes
obligaciones, para salvaguardar la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad
y eficiencia que deben ser observadas en el desempeño de su empleo, cargo o
comisión y cuyo incumplimiento dará lugar al procedimiento y a las sanciones
que corresponden, sin perjuicio de sus derechos laborales”.
En su
inciso XIII señala: “Excusarse de intervenir en cualquier forma en la atención,
tramitación o resolución de asuntos en los que tenga interés personal, familiar
o de negocios, incluyendo aquellos de los que pueda resultar algún beneficio
para él, su cónyuge o parientes consanguíneos hasta el cuarto grado, por
afinidad o civiles, o para terceros con los que tenga relaciones profesionales,
laborales o de negocios, o para socios o sociedades de las que el servidor
público o las personas antes referidas forman o hayan formado parte…”
El
artículo 66 de nuestra Carta Magna estatal define a los servidores públicos de
la siguiente manera: “…a todo aquel que desempeñe un cargo de elección popular,
un empleo o una comisión en cualquiera de los tres poderes del Estado, en los
ayuntamientos y en los órganos desconcentrados, organismos descentralizados,
órganos autónomos (…) empresas de participación estatal o municipal,
fideicomisos públicos, órganos jurisdiccionales y en general toda persona
física que perciba una retribución con cargo al erario…”
El
quid del asunto es que la Contralora estatal Patricia Jiménez Oropeza tiene motivos de fondo para sancionar no
sólo a Don Carlos Elías Dagdug Martínez,
sino a Carlos José Dagdug Nazur,
quienes podrían ser cesados de sus actuales encomiendas por negligentes e
irresponsables.
Después
de todo el buen juez por su casa empieza. ¿O no?
“SQUOD
SCRIPS, SCRIPSI”
(LO
ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)
Quien
también debe de estarse comiéndose las uñas de las manos y hasta la de los
pies, es el todavía director general de la CONAGUA, Jorge Octavio Miganjos Borja. El mismo que cuando llego a la
entidad juró y perjuró que era un hombre honrado y que no tenía nada de
qué arrepentirse.
Empero,
el expediente que le están armando las autoridades federales ya rebasó la media
docena de carpetas, pues aparte de los contratos millonarios que negoció con
sus cuates del alma mediante concursos amañados, están a punto de cerrar las
investigaciones por el terreno que compró -ilegalmente lo rellenó- en la Laguna de las
Ilusiones para erigir la faraónica mansión que está construyendo.
No
hay necesidad de ser ingeniero o arquitecto para darse perfectamente cuenta de que
con el sueldo que gana y ha ganado no le hubiera dado ni para el enganche de
los metros comprados, y menos aún para la soñada construcción.
Cuando
reviente la bomba hasta los suegros van a salir a relucir, y de paso hasta el
parentesco con un funcionario de la administración estatal que tiene fama de
miserable.
Está
visto que en Tabasco todo mundo hizo negocio en detrimento de los tabasqueños,
y avecindados aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.