martes, 26 de junio de 2018

#TABASCOPOLÍTICO / José Luis Gutiérrez Gutiérrez / CANDELARIO, FALSO PROFETA / Columna / Mar Ju 26

TABASCO POLÍTICO

José Luis Gutiérrez Gutiérrez

CANDELARIO, FALSO PROFETA


Después de ver el pasado fin de semana los cierres de campaña de Gina Trujillo Zentella y Gerardo Gaudiano Rovirosa sostengo que no solo el defenestrado exdirigente estatal del PRD, Candelario Pérez Alvarado, tiene una percepción equivocada de lo que realmente está ocurriendo en cada uno de los rincones del Estado de Tabasco, sino también quienes vaticinan que los candidatos de Morena van a llevarse el próximo domingo el “carro completo”.
Y así como el diputado federal está equivocado en sus apreciaciones de lo que va a ocurrir en los comicios del 1 de julio, el otro que va a errar en su convocatoria para que los ciudadanos voten 6de6 es Andrés Manuel López Obrador.
Ni uno ni otro escenario electoral van a presentarse. La disputa por la gubernatura, por las alcaldías y por las diputaciones locales están en su mayoría cerrado. Los escaños y curules del Congreso de la Unión también.
En lo que sí tienen razón es que el paisano va fácilmente a ganar, como aconteció en el 2006 y 2012. Si Roberto Madrazo Pintado y Enrique Peña Nieto no pudieron con él menos José Antonio Meade Kuribreña. Si éste obtiene 150 mil votos que se den por bien servido.
De esto a que los demás abanderados de Morena triunfen en las urnas está en veremos, hay un gran trecho.
Hay municipios en los que no me explicó cómo van a ganar, como es el caso de Cárdenas. En dónde el ex priista y ahora morenista Armando Beltrán Tenorio -mejor conocido como “La Pelota”- vaya a salir avante cuando todo indica que el edil con licencia Rafael Acosta León lleva la delantera.
En Huimanguillo el también ex priista y converso a Morena José del Carmen Torruco Jiménez tiene menos posibilidades que el cardenense Beltrán Tenorio de triunfar. Aquí el tiro es entre la priista María Inés de la Fuente Dagdug y el alcalde -con licencia también- perredista José Sabino Herrera Dagdug.
En el Centro, que es la otra demarcación electoralmente de las sustanciales para amarrar el gobierno tampoco la tiene segura Evaristo Hernández Cruz, ahí, Jaime Mier y Terán Suárez y Adrián Hernández Cruz están dando la batalla.
De los municipios torales para echarse la gubernatura en el bolsillo, Comalcalco es el que parece que tienen asegurado; aunque el candidato del PRI Jaime Hernández Córdova (a) “Chinchunchao” viene apretando fuerte, al grado tal que junto con su par del PRD Neyda Beatriz García Martínez está disputándole la presidencia a Lorena Méndez Denis.
¿Quién iba a imaginárselo?
Y así como estos municipios hay otros como Tenosique, Balancán, Centla, Cunduacán, Macuspana, Jonuta en donde los pronósticos para el PRI y el PRD son promisorios.
El propio PVEM puede quedarse con Emiliano Zapata y Teapa.
Creo que Candelario Pérez Alvarado y muchos de los que coinciden con él van a resultar “falsos profetas”. Sus proyecciones electorales distan mucho de lo que ha venido ocurriendo en los últimos días en los eventos políticos de priistas y perredistas.
Insisto, los multitudinarios cierres de campaña de Gina Trujillo Zentella y Gerardo Gaudiano Rovirosachocan con el discurso triunfalista de morenistas.
A ver qué ocurre dentro de cinco días cuando pasadas las 8:00 horas comience la verdadera encuesta, la que vale para llegar a la Quinta Grijalva, a las alcaldías, regidurías, cámara de diputado y a San Lázaro y Paseo de la Reforma.
De qué va a ver sorpresas no tengo la menor duda, si no, al tiempo.
“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”
(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)
Mientras Oscar Cantón Zetina logró política y mediáticamente sus propósitos al abandonar la candidatura externa del gobierno del PVEM a Humberto Domingo Mayans Canabal su estrategia resultó un desastre.
Internamente su adhesión cayó como un bombazo y afuera tampoco agradó.
Si la estrategia la pusieron en marcha para levantar los ánimos de los morenistas, pues no funcionó. Y si la echaron a andar para atrapar a priistas, pues tampoco pegó.
No sé de quién sería la idea de exponerlo, pero la chorreó requetefeo.
Calladito se veía mejor, más aún cuando todo mundo sabía que desde hace meses venía apoyando sigilosamente a su cuñado Adán Augusto López Hernández.
Desde que me enteré de que el exsecretario “granierista” de Comunicación y Transportes, Aquiles Domínguez Cerino, estaba operando para el notario público con licencia vi clarita la mano del felón más grande de Tabasco.
Fue la señal que confirmó mis sospechas.
Y el inexorable tiempo me dio la razón: el senador priista había de nuevo apuñalado al PRI por la espalda…fiel a su costumbre.

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