TABASCO POLÍTICO
José Luis Gutiérrez Gutiérrez
“NO HAY PLAZO QUE NO SE CUMPLA NI FECHA QUE NO SE LLEGUE”.
Y, efectivamente el próximo domingo 4 de junio, exactamente dentro de tres días, se efectuarán las elecciones en el Estado de México (Gobernador), Coahuila (Gobernador, 38 ayuntamientos, 16 de diputaciones de Mayoría Relativa y 9 de Representación Proporcional), Nayarit (Gobernador, 20 alcaldías, 18 escaños de MR y 12 de RP) y Veracruz (212 presidencias municipales).
No está de más recordar, que la lista nominal con más ciudadanos es la del Estado de México: 11, 303, 369 potenciales electores. Seguido de Veracruz, con 5,571, 891 votantes. Coahuila, con 2,064,613 y Nayarit, con 814, 381. En total: 19,754.254 mexicanos que constitucionalmente deberían acudir a las urnas a elegir a sus autoridades.
Por su importancia política, electoral, económica -tiene un presupuesto anual de más de 262 mil millones de pesos- demográfica y social, la tierra natal de Enrique Peña Nieto y del famoso grupo Atlacomulco, es la que desde un inicio tiene todos los reflectores encima, absolutamente todos.
Allá están concentradas todas las baterías de los partidos políticos y la operatividad de ex y gobernadores perredistas, priistas y panistas, senadores, diputados federales y locales, alcaldes… Así como la mirada y preocupación de académicos, politólogos, observadores, líderes de opinión, rectores, empresarios, incluida, desde luego, la atención internacional. Todo el mundo.
Para el grueso de la clase política nacional, articulistas, editorialistas y columnistas, y un largo etcétera, los resultados de la elección mexiquense decidirá en gran medida el derrotero de la sucesión presidencial, como casi siempre ha ocurrido, a excepción de los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Si gana la candidata de Morena, Delfina Gómez Álvarez, como muchísimo están apostando y presumiendo, los bonos de Andrés Manuel López Obrador se irán a los cuernos de la luna. Si, por el contrario, triunfa Alfredo Del Mazo Maza, el PRI estaría mandando señales a todo el priismo de que no todo está perdido rumbo al 2018.
Si se alza con la victoria en Coahuila con su candidato a la gubernatura Miguel Ángel Riquelme Solís, pues estaría en plena recuperación. Así gane Nayarit el PAN-PRD-PT, Partido Revolución Socialista con Antonio Echeverría García.
La mayoría de los estudios demoscópicos coinciden en que entre Gómez Álvarez y Del Mazo Maza hay empate técnico.
Sigo insistiendo en que Enrique Peña Nieto no va a perder esa plaza tan emblemática para el priismo nacional, y menos cuando el Estado de México va a ser su refugio en caso de que pierda la presidencia de la República.
Señores y señoras: ¡hagan sus apuestas! La casa pierde.
“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”
(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)
Disculpe usted diputada priista, Gloria Herrera de la Cerna, pero a la Presidenta Consejera del IEPCT, Maday Merino Damián y secuaces que la acompañan no les queda ni una pizquita de credibilidad y de honorabilidad, mejor ni hablemos.
No sé si usted está enterada, pero durante el tiempo que llevan ahí, han dejado muchísimo que desear.
Se han subido el sueldo de forma vergonzosa, así como las compensaciones y prestaciones de ley. Los recursos del IEPCT los han dilapidado, y como consejeros electorales han actuado de manera sospechosa.
En lugar de pedirles transparencia y rendición de cuentas, habría que pedir su inmediata renuncia en el Congreso local, del que por cierto forma parte.
Esos pillos y pillas del órgano electoral no merecen ningún aumento de presupuesto.
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