Benjamín Dueñas Azcona
México es compromiso de todos
Venezuela y su consecuencia histórica
Detestable, reprobable, aberrante lo que sucede en Venezuela, tan lejos del sureste mexicano, pero al igual que Cuba, tan cerca de la vida cotidiana en el futuro de los mexicanos si nos equivocamos en elegir a nuestros mandatarios, que si bien los últimos en funciones es cierto, están reprobados socialmente, permiten a los mexicanos sobrevivir a quienes cuentan con una fuente de ingresos, sea en el comercio formal e informal o en el sector industrial o empresarial, y ya de perdis, de burócratas -bien remunerados en sus pocas altas esferas-, pero en Venezuela, la que hoy día jueves 30 de marzo vive el escarnio de un Golpe de Estdo, disfrazado quizá, y ya vigente desde el mismo enquistamiento de un gobierno impuesto, autoritario, dictatorial, militar, desconociendo al Congreso Federal, ese pueblo, Venezuela, hasta ayer miércoles 29 de marzo sobrevivía miserablemente en su CLASE TRABAJADORA, con apenas lo suficiente y con salario de profesionistas, para adquirir en el mes tres pollos para la alimentación de la familia, leyó bien, tres pollos al mes en familias con sustento de salario profesional.
Una población sobajada, aplastada por el autoritarismo, asfixiada por su nefasto gobierno, electo éste lamentablemente por la misma población en su momento, esperanzada en la ilusión de que llegarían mejores tiempos a Venezuela llevando a la Presidencia de la República a un populista, a uno de ellos, surgido del mismo pueblo, personificado en la arrolladora imagen del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, apropiándose éste de Poder desde su elección como Presidente de la República Bolivariana de Venezuela desde el 2 de febrero de 1999 hasta su fallecimiento en 2013. Y de ahí para acá, si Venezuela estaba mal, pasó dramáticamente a estar peor, al erigirse en amo y señor otro nefasto personaje para la sufrida población, Nicolás Maduro Moros, de quien sus detractores y conocidos en su país manifiestan que no terminó la secundaria, y los más benévolos de estos, sostienen que culminó el bachillerato pero no ingresó a escuelas de estudios superiores. Fue impuesto como Presidente atropellando la Constitución, desplazando a Diosdado Cabello Rondón, quien era el Presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela.
De la pobreza mexicana a la hoy pobreza en Venezuela
Voces diversas en redes sociales en México, afines al andresmanuelismo, asientan y cuestionan que porqué tanta preocupación por Venezuela, cuándo en nuestro país hay al menos 20 millones de mexicanos en extrema pobreza. Lamentables opiniones surgidas de seres inteligentes, normalmente solidarios con el dolor ajeno, pero cegados por cuestiones políticas partidistas, en donde el tema Venezuela nada tiene que ver con la pobreza en México, ya que se alcanza y rebasan los 50 millones de mexicanos sobreviviendo en tales condicionantes. No es la pobreza de Venezuela lo que trasciende y lacera, es la forma de gobierno y el que TRABAJADORES PROFESIONISTAS, apenas les alcance para adquirir para la comida familiar, de consortes e hijos, de pequeños, de bebés, tres pollos durante un mes, lo que expone la realidad lacerante de este pueblo, ya que entonces en qué condiciones sobreviven sus millones de habitantes en extrema pobreza, cuándo los que tienen poder adquisitivo, solo les rinde el paupérrimo salario para comprar tres pollos mensuales.
¿México ciego o despierto?
Lo que sucede en estos infaustos años en Venezuela no está nada lejos de que acontezca en México, si se toman muy malas decisiones, tanto en la postulación de candidatos por parte de los partidos políticos, como por el voto de los electores, si es que dan cabida a aquello de que "si estoy jodido, pues que se jodan los demás", olvidando estos ciudadanos lo más importante en su razón de existir, el futuro obscuro inmediato para sus hijos, nietos, bisnietos. y toda su descendencia.
Que hay una aberrante inseguridad pública y rateros en funciones de gobierno como algunos gobernadores hoy prófugos, lo mismo que el tal Layín y su "Robé poquito" (200 millones de pesos para este tipo es poquito) o el Procurador en funciones de Nayarit -encarcelado ayer en los feudos de Donald Trump-, una entidad que éste mismo año irá a elección constitucional. O el asqueroso caso de la niña Daphne en Veracruz y la mentada de madre al pueblo de México por el impartidor de justicia disfrazado con toga, dejando en libertad a un criminal confeso, y que hoy después de millones de cuestionamientos, videos y redacciones en redes sociales y medios de comunicación, bautizándolo como "El Juez Porky", "se siente atosigado" y solicitaba retirarse de otro de esos casos, otro Porky, con su investidura federal, pero no, antes, el Poder Judicial lo separó de su encomienda al ser toda una vergüenza nacional.
Con todo y eso, México debe de salir adelante y bien, en comunión, unido en su población, en pos de un mejor futuro para quienes aquí habitamos.
El tabasqueño Andrés Manuel López Obrador no es un peligro para México, el peligro somos los mismos mexicanos si no alcanzamos a ver más allá no de nuestras narices, de los ejemplos palpables, tan solo en América, en Venezuela, Cuba, y Brasil. México es problema de todos, no solo de un político, una autoridad, o una quimera. Las fuentes de empleos y antes, las industrias, deben de abrirse para beneficio laboral de los ciudadanos; la planeación familiar ya es urgente, lo mismo que muchos etceteras más, y si bien la población debe de inmiscuirse, así sea con su voto, necesario es una rectoría, y ésta debe de llevarla el Estado, pero con vergüenza, con entrega, con decoro, con integridad, llanamente con transparencia.
Tampoco es que ese México esté ya en ciernes en el abismo, pero difícil y complicada es en este momento nuestra situación como país y población. Sin duda se toman ya las medidas pertinentes al respecto, seguro es que el camino hacía ese necesario y urgente reencuentro con el México de antaño, el de apenas hace siete décadas, está en construcción.
Por lo mismo, y en ese tenor, se requiere en todo el país, seriedad y suficiencia moral en los gobiernos, en los industriales, en el empresariado, en los sindicatos, en los profesionistas, en las instituciones, en los medios de comunicación, y sobre todo en las redes sociales.
Que hay una aberrante inseguridad pública y rateros en funciones de gobierno como algunos gobernadores hoy prófugos, lo mismo que el tal Layín y su "Robé poquito" (200 millones de pesos para este tipo es poquito) o el Procurador en funciones de Nayarit -encarcelado ayer en los feudos de Donald Trump-, una entidad que éste mismo año irá a elección constitucional. O el asqueroso caso de la niña Daphne en Veracruz y la mentada de madre al pueblo de México por el impartidor de justicia disfrazado con toga, dejando en libertad a un criminal confeso, y que hoy después de millones de cuestionamientos, videos y redacciones en redes sociales y medios de comunicación, bautizándolo como "El Juez Porky", "se siente atosigado" y solicitaba retirarse de otro de esos casos, otro Porky, con su investidura federal, pero no, antes, el Poder Judicial lo separó de su encomienda al ser toda una vergüenza nacional.
Con todo y eso, México debe de salir adelante y bien, en comunión, unido en su población, en pos de un mejor futuro para quienes aquí habitamos.
El tabasqueño Andrés Manuel López Obrador no es un peligro para México, el peligro somos los mismos mexicanos si no alcanzamos a ver más allá no de nuestras narices, de los ejemplos palpables, tan solo en América, en Venezuela, Cuba, y Brasil. México es problema de todos, no solo de un político, una autoridad, o una quimera. Las fuentes de empleos y antes, las industrias, deben de abrirse para beneficio laboral de los ciudadanos; la planeación familiar ya es urgente, lo mismo que muchos etceteras más, y si bien la población debe de inmiscuirse, así sea con su voto, necesario es una rectoría, y ésta debe de llevarla el Estado, pero con vergüenza, con entrega, con decoro, con integridad, llanamente con transparencia.
Tampoco es que ese México esté ya en ciernes en el abismo, pero difícil y complicada es en este momento nuestra situación como país y población. Sin duda se toman ya las medidas pertinentes al respecto, seguro es que el camino hacía ese necesario y urgente reencuentro con el México de antaño, el de apenas hace siete décadas, está en construcción.
Por lo mismo, y en ese tenor, se requiere en todo el país, seriedad y suficiencia moral en los gobiernos, en los industriales, en el empresariado, en los sindicatos, en los profesionistas, en las instituciones, en los medios de comunicación, y sobre todo en las redes sociales.
Nada va a mejorar de la noche a la mañana siguiente, pero se deben de lograr sustanciales avances con lo que hoy tenemos a nuestro alcance, bajo la batuta guste o no, de manera importante y total, de las autoridades vigentes en lo federal, y la experiencia y compromiso de las estatales, lo que conlleva a la vez a que no se gaste la pólvora en infiernitos, en insulsos temas como los de si Yunes Linares, Velasco Coello, Núñez Jiménez, Mancera Espinosa, Aureoles Conejo, Moreno Cárdenas, Pavlovich Arellano, o Rodríguez Calderón, por no mencionar a todos los gobernadores, "ya se va", "pide licencia", "tira la toalla". ¡Ninguno se va señores! México no está en este momento para eso, para enredos y retrocesos.
México está para dejar de aplicar los precios máximos en el mercado de combustible, como a partir de hoy sucede en Baja California y Sonora; o como para poner en marcha los seis proyectos de desarrollo que están a la espera en la Zona Económica Especial (ZEE) en Tabasco, y así aperturar inversiones por la cantidad de Dos Mil Millones de Dólares en el Puerto de Frontera, en el municipio de Centla, lo que pondrá a ésta entidad de nueva cuenta en el boom petrolero, pues dichos proyectos están inmersos en torno al petroleo.
De Salida
Inversiones igual las hay en puerta, con cifras que rebasan los miles de millones de pesos, para Veracruz, Chiapas, Oaxaca, Yucatán, Quintana Roo, lo mismo que en el norte del país. *** Diuuu.
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