martes, 7 de junio de 2011

Doble Filo: Homero T. Calderón / Columna / Jun 07

(Publicado en el Diario Tabasco Hoy)

Verdaderos negocios de poder

Ignoro cuáles sean los resortes que mueven los negocios públicos en la República. Entre líneas se vislumbran los grandes negocios mientras el poeta Javier Sicilia encabeza una manifestación pacífica que lo ubicará el próximo viernes en Ciudad Juárez, en protesta porque la autoridad nacional no ha cumplido su función de gobernar. ¿Cómo se hacen los grandes negocios? ¿Cómo se mueven los agentes a sueldo de los grandes capitales? ¿Todo se tapa bajo la cobija de la presentación --por ejemplo-- de presuntos delincuentes a los que se interroga, no en los juzgados y sí en los medios de comunicación? ¿Es el empresario Jorge Hank Rhon culpable de algo? ¿Es en verdad dueño de las armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas, que el Ejército dice que fueron encontradas en sus propiedades? ¿Es una puesta en escena? ¿Por qué se le hace juicio sumario antes de presentarlo ante el Ministerio Público? Algo está pasando en Dinamarca. Se siente una fuerza extralegal que quiere demostrarnos que somos nosotros, los ciudadanos, la parte más indefensa. No es necesario que se nos demuestre eso. Los ciudadanos somos --desgraciadamente-- la carne de cañón del poder. Y cuando todo parecía estar a buen resguardo, en los estados siguen los negocios en jauja. Cuando los negocios de Héctor López Peralta parecían ser cuentos para niños, en Tabasco se siguen haciendo negocios de poder. Según documentos que circulan por algunas oficinas del gobierno federal, de las cuales este columnista posee copia, se trasluce un negocio que se maneja con muy bajo perfil. En la delegación Conagua "robalea" un oscuro empleadillo, Mifoel Segura, el único de los malos elementos que ocuparon lugares preponderantes en la anterior delegación (la de Omar Komukai). Este hombrecito, una especie de Gutierritos, funciona promoviendo estimaciones y pagos a contratistas bajo una comisión a modo. Podría pasar desapercibido si no fuera porque es el enlace de un constructor consentido del gobierno de nombre Eduardo Gurza. Su relación con Tabasco lo hace a través de su hermana, directora de Protección Civil nacional, la señora Laura Gurza. Sus contratos con Conagua Tabasco andan por el orden de los 500 millones de pesos, a nombre de una megaempresa (Consorcio Creto). Esa sería la parte más benigna de sus contratos. Información en mi poder, a través de contactos veracruzanos, lo ubican como dueño de un supermegacontrato de alrededor de 6 mil millones de pesos. ¿Qué haría este señor para meterle el diente a tan megatérica cantidad? Todo: proyecto, construcción y supervisión de obra. El señor sería una especie de MP, juez y parte al mismo tiempo. De estos contratos, lector lectora, ya no se daban desde la época de Miguel Alemán. Recientemente también, la televisión nacional nos habló de un caso donde a un simple secretario de Acuerdos de un juzgado, se le descubrieron cuentas de ahorros por 432 millones de pesos. ¿Cómo con estos negociantes podríamos recuperar a nuestra degradada patria?...

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