(Publicado en el Diario La Verdad del Sureste)
Repuntó la corrupción en Tabasco
El Gobierno de Tabasco contrató a Wisin y Yandel para las actividades de pre-Feria. Los reggaetoneros serían el plato fuerte en la imposición de bandas de las embajadoras, el jueves 5 de mayo. Al final, los artistas de Puerto Rico cancelaron su presentación porque Wisin —Juan Luis Morera es su nombre real— se contagió de varicela.
El miércoles 4 de mayo, las periodistas de espectáculos Maxine Woodside y Ana María Alvarado dieron a conocer que Wisin y Yandel habían cobrado ¡200 mil dólares! por su presentación y que el empresario que representa a los artistas aún no había devuelto el dinero.
Para estas fechas quizá el asunto ya se resolvió, aunque de cualquier forma la cantidad de 200 mil dólares llama mucho la atención porque se trata sólo de uno de los tantos artistas programados para la Feria, en un Tabasco abatido por la supuesta falta de recursos que provocó despidos y cancelación de programas sociales.
Sin embargo, hay algo más que realmente sorprende y merece ser investigado. Y es que en su programa “Todo para la mujer”, que se transmite por Grupo Fórmula, Maxine Woodside y Ana María Alvarado también revelaron que el pago de los 200 mil dólares se hizo ¡en efectivo!
De acuerdo con la información, el monto se entregó en una oficina ubicada en la Delegación Coyoacán de la Ciudad de México, donde tiene su oficina el empresario que representa a Wisin y Yandel en México.
Mientras daban a conocer los datos, las conductoras de “Todo para la mujer” no pudieron ocultar su asombro. “¡Ay diosito, 200 mil dólares en efectivo!”, expresó ante el micrófono Maxine Woodside. Los signos de admiración no son gratuitos, pues 200 mil dólares equivalen a cerca de 2 millones 500 mil pesos.
No es la primera vez que se sabe de movimientos millonarios en efectivo donde está involucrado el Gobierno de Tabasco. En noviembre de 2007, justo en momentos en que el estado se encontraba colapsado por la inundación, el diario yucateco Por Esto! informó el decomiso de 8 millones de pesos que eran transportados en una avioneta Cessna 340.
En aquella ocasión, las autoridades detuvieron al piloto Gerardo
Beauregard Antonio y otro pasajero de nombre Héctor Partida González, quienes en su declaración revelaron que el dinero pertenecía al empresario Martín Alberto Medina Sonda.
El caso adquirió mayor relevancia cuando se supo que Medina Sonda había sido socio del secretario de Administración y Finanzas del Gobierno de Tabasco, José Manuel Saiz Pineda, quien no negó conocer al empresario aunque declaró que no tenía nada que ver con el dinero decomisado.
La situación nunca quedó del todo clara y se disolvió con el tiempo. Pero José Saiz se ha negado reiteradamente a comparecer ante el pleno del Congreso del Estado para explicar éste y otros asuntos más que tienen en entredicho a las finanzas locales.
Hace unos meses, un empresario local que mantendré en el anonimato me confió que firmó un contrato para dotar de ciertos servicios al Gobierno del Estado. Con las cejas levantadas y la voz subida de tono por el asombro, narró que para pagarle lo citaron en un conocido hotel de Villahermosa. La cantidad era de algunos cientos de miles de pesos.
De inicio, le extrañó que la cita fuera en un hotel y no en una oficina pública donde bien le podrían entregar un cheque si es que no le pagarían a través de una transferencia bancaria. De todos modos acudió a la cita y, al llegar, lo trasladaron a una habitación donde ¡le pagaron todo en efectivo!
Estos casos despiertan todo tipo de sospechas y dejan ver que algo irregular sigue imperando en el manejo del dinero público de los tabasqueños. ¿Por qué se pagan en efectivo sumas millonarias en situaciones que involucran al Gobierno de Tabasco? ¿Quién es la autoridad responsable de ese tipo de transacciones sin control? ¿Qué no se han restringido las operaciones millonarias en efectivo para evitar casos de lavado de dinero?
Frente a estos casos, hay también unos datos recientes que exhiben sin maquillaje la realidad estatal de nuestros días. Según el último reporte de Transparencia Mexicana, Tabasco está en sexto lugar de corrupción a nivel nacional.
Según el Índice Nacional de Corrupción y Buen Gobierno 2010, dado a conocer recientemente, la entidad tabasqueña se encuentra en ese sexto sitio con una calificación de 10.8, con lo cual también se ubica por encima de la media nacional en corrupción, que es de 10.3
Pero el dato se vuelve más alarmante si se recuerda que en 2007 el estado de Tabasco tenía una calificación de 9.7, lo cual indica que la corrupción fue a la alza en los años recientes.
Y si se analizan las cifras históricas, la situación es aún peor porque hace una década el índice era menor. En 2001, según los datos de Transparencia Mexicana, Tabasco tenía 8.5 en corrupción mientras que en 2010 subió a 10.8.
El manejo de millones de pesos en efectivo es sin duda un reflejo del aumento en los índices de corrupción en Tabasco que ha documentado Transparencia Mexicana. Es imposible no relacionar una cosa con la otra.
POR CIERTO… Cuando se presentó el proyecto de la Plaza Altabrisa, el gobernador Andrés Granier presumió que esa obra demostraba la confianza que tenían los empresarios para venir a invertir a Tabasco. El sábado pasado, unos sujetos llegaron a la puerta donde se lleva a cabo esa obra y robaron la bolsa de dinero con la que se tenía que pagar el salario de los obreros. Cerca de 80 mil pesos se llevaron y los delincuentes, por supuesto, lograron escapar. Si el gobierno de Andrés Granier ahora no es capaz de ofrecer seguridad para evitar ese tipo de robos, entonces está traicionando la confianza que le brindaron aquellos inversionistas. El hecho es que en Tabasco los delitos siguen al alza, y no nada más los atribuibles al crimen organizado, sino también los del fuero común que están en la esfera de las autoridades estatales.
fernandovazquezr@gmail.com
Blog: jahuactal.blogspot.com
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