sábado, 13 de noviembre de 2010

Visión Citadina: Andrés Llanos Córdova / Columna / Nov 13

(Publicado en el Diario Olmeca)

"PARTICIPACIÓN CIUDADANA Y DEMOCRACIA"

En Tabasco, la participación ciudadana es un elemento adjunto a su realidad política y social. A través de la historia, dicho elemento ha tenido etapas extremas, sin características ortodoxas.

Es pertinente recordar que una de las definiciones del nombre de Tabasco, sostiene que es en honor al gobernante Tabscoob. El Señor y cacique de vastas tierras húmedas, encontrado en la travesía de Hernán Cortés. Los habitantes del territorio que hoy ocupa Tabasco tenían características de guerreros, que si bien se sometían a la voluntad del cacique, a su vez ellos sometían a los habitantes de los territorios cercanos.

Más de la mitad del siglo XX, Tabasco estuvo envuelto en diversos enfrentamientos; meras manifestaciones de descontento social, por la falta de democracia, por la injusticia y abusos de los gobernantes. La respuesta invariable fue la represión, lo que trajo consigo hechos sangrientos constantes.

Solo así se entiende que la entidad haya tenido gobernadores por tan solo tres días, el ascenso al poder de algunos hasta en 3 ocasiones; muchos interinatos, varios militares al frente del gobierno de un estado que paradójicamente, ha sido considerado como un pueblo salvaje y alguna vez, declarado República Independiente en el siglo XIX.

La represión de la práctica religiosa durante el garridismo y sus resultados; el hostigamiento a las corrientes ideológicas opositoras al gobierno y en algunos casos la cooptación de las mismas; nos muestra una intensión febril del monopolio del poder, con tintes caciquiles. Sin embargo la represión a las libertades y la participación auténtica, representa el caldo de cultivo que por momentos estalla en contra del poder; tal como ocurrió en Marzo de 1955, en la salida del gobernador Manuel Bartlett.

De igual manera ocurrió en 1988 y 1994 donde se presentaron conflictos pos electorales y el enfrentamiento de dos grupos que si bien hasta la actualidad concentran seguidores, no promueven la sana participación de los ciudadanos. La anulación de las elecciones de gobernador en el año 2000, es un reflejo de la trampa en que vive Tabasco.

La voluntad ciudadana debe manifestarse por los medios institucionales, ahora concebidos y a su alcance; no es con marchas y plantones, pero tampoco con apoyos ciegos, producto de la dádiva; como debe darse la participación de los ciudadanos en los asuntos públicos, porque ambos esquemas son autodestructivos, prolongan el enfrentamiento absurdo e inhiben el progreso.

Tabasco tiene urgencia de una Reforma Electoral que aporte certidumbre y haga que después de cada elección, todos regresen a sus actividades productivas y en paz. La Reforma permitirá en gran medida, avanzar hacia un escenario democrático, garante de la participación libre y consciente de los ciudadanos. Está comprobado que la democracia es un elemento clave para el progreso; ahora decidamos el camino a seguir….

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.