martes, 23 de noviembre de 2010

Transparencia Política: Erwin Macario Rodríguez / Columna / Nov 23

(Publicado en el Diario Rumbo Nuevo)

Buena política

Seamos optimistas. Tengamos confianza
en nosotros mismos. Somos un pueblo
inteligente y sensible; como lo pensó
José Saramago en sus palabras “sabemos
mucho más de lo que creemos, podemos
mucho más de lo que imaginamos”. Humberto
Mayans 201110 / Discurso

erwinmacario@hotmail.com
erwinmacario@rumbonuevo.com.mx

Revisar a profundidad el modelo de desarrollo de México, y en particular de Tabasco, es la demanda principal que se escuchó en el centenario del inicio de la Revolución Mexicana.

Es un requerimiento de la nación. Y en nuestro caso, de los tabasqueños.

Quien lo dice no es un adversario político de los gobernantes. No le mueve el fin de sólo criticar, buscar los reflectores mediáticos, agredir al gobierno.

Al plantear la modernización de las instituciones políticas, económicas y sociales de nuestro país, hace una valoración de lo que se ha hecho en esta entidad del sureste mexicano y concluye que si bien el gobernador Andrés Granier ha hecho un esfuerzo sin precedente en este sentido, “es mucho lo que falta por hacer”.
Trabajo solidario y responsable de pueblo y gobierno unidos, es el planteamiento.

Bueno es, por ello, que se nos recuerde a los tabasqueños cual ha sido una de las causas principales para que Tabasco sea el Tabasco que no queremos, con los problemas de la crisis, las inundaciones y otros que nos han afectado a todos.

Esto es: “El divisionismo y los conflictos que nos han caracterizado en los últimos 20 años deben desaparecer. Unidad, solidaridad y tolerancia deben ser valores que definan la actuación de los actores políticos, de los comunicadores, de los intelectuales y de la ciudadanía en general”.

No es tampoco ajeno al análisis de cualquiera que le interese Tabasco el que se diga claramente que los cuatro años de calamidades , de inundaciones ocasionadas por intensas lluvias causadas por el cambio climático global, es también “por errores cometidos en las últimas décadas en la estrategia de instrumentación del modelo de desarrollo en la planicie tabasqueña y en las tierras altas de Chiapas.

Allá y acá transitan los ríos más caudalosos de este país, que pese a las obras hidráulicas —o tal vez por ellas, al convertirlas en generadoras de energía más que en reguladoras de las grandes avenidas de esos ríos— han sido más un problema que una solución para el desarrollo tabasqueño.

Más de 40 mil millones de pesos en daños a la economía de Tabasco, en cuatro años consecutivos de inundaciones, es algo que al revisar ese modelo de desarrollo tendrá que evitarse en el futuro.

También es necario atender que en estas tierras se encuentran las reservas más importantes de petróleo y gas de la nación, sin que se “haya sembrado” ese producto natural como se dijo al inicio del boom petrolero.
Todo ello, según la voz del tabasqueño este 20 de noviembre, urge, principalmente de la unidad que el gobernador Granier ha demandado.

Basta ya de divisiones y enfrentamientos entre los tabasqueños. Ya se necesita, y él lo dijo, hacer buena política. “La buena política es la que dialoga y une; no la que divide y enfrenta”.

Es una verdad: En política con quien nada quiere, nada se puede. Su llamado es decisivo, tal vez la última llamada para la gran obra que tienen que representar todos los actores de la política tabasqueña a partir de ya y, primordialmente, del año entrante, el año político:

“Dejemos a un lado la intolerancia. Hagamos buena política. Pongamos los intereses de Tabasco, por encima de los personales y de grupo. Unámonos para servir a Tabasco en estos tiempos difíciles. El pueblo así lo demanda”.

El discurso de Humberto Mayans Canabal, secretario de Gobierno, no iba dirigido a un grupo o partido político en especial. Desde el sitial político que le da el cargo se dirigió, como orador oficial, a todos. A tirios y troyanos. Quien tenga oídos que escuche.

Sería lamentable seguir perdiendo el tiempo en pleitos estériles, enconos y odios que han distraído desde hace dos décadas el desarrollo de Tabasco.

Lado Claro
El movimiento se demuestra andando. La plática que por más de media hora sostuvieron —a campo abierto, en el hotel Howard Jhonson— Humberto Mayans, secretario de Gobierno, y José Carlos Ocaña Becerra, acalla rumores y deja al descubierto que Lorena Beauregard se ha ido solita y su alma por la libre.

Periodista. Premios: Radio Chapultepec, Club Primera Plana (35 y 40 años), Premio México de Periodismo, el Premio Estatal 1991 y el Rumbo Nuevo 2010. Ha publicado Periodismo y utopía, Vocabulario tabasqueño (en colectivo) y el prólogo de La última ruta de Cuauhtémoc, de Humberto Muñoz Ortiz www.erwinmacario.blogspot.com

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