Vivimos en una sociedad leprosa que genera divisionismo: Denis Ochoa
Todo lo que sea para bien de nuestro pueblo es apoyado por la iglesia, no visto como un campo político, económico ni técnico. (Foto: El Heraldo de Tabasco)
Publicado en el Diario El Heraldo de Tabasco
10 de octubre de 2010
Jesús Manuel Domínguez
Villahermosa, Tabasco.- Vivimos en una sociedad "leprosa" con mucha marginación, pobreza, divisionismos y corrupción que dañan sobremanera al propio pueblo mexicano sumido en problemas y situaciones adversas, expresó el presbítero Denis Ochoa Vidal durante la homilía en el vigésimo octavo domingo del tiempo ordinario.
El evangelio de este domingo presenta a Jesús que cura a diez leprosos, de los cuales sólo uno, samaritano y por tanto extranjero, vuelve a darle las gracias. El Señor le dice: "Levántate, vete: tu fe te ha salvado". Esta página evangélica nos invita a una doble reflexión.
Ante todo, nos permite pensar en dos grados de curación: uno, más superficial, concierne al cuerpo; el otro, más profundo, afecta a lo más íntimo de la persona, a lo que la Biblia llama el "corazón", y desde allí se irradia a toda la existencia. La curación completa y radical es la "salvación". Incluso el lenguaje común, distinguiendo entre "salud" y "salvación", nos ayuda a comprender que la salvación es mucho más que la salud; en efecto, es una vida nueva, plena, definitiva.
Aludiendo al pasaje bíblico, Ochoa Vidal indicó que analizando este evangelio a la luz de la realidad actual, resulta que nuestra sociedad padece también de lepras, porque en la sociedad hay gente marginada, gente dividida, grupos enconchados que miran únicamente sus intereses particulares o grupos y eso es en todos los campos, llámese social, religioso, político.
"Creo que Jesús nos quiere curar de la lepra, por eso hay momentos como esta situación tan difícil que atraviesa Tabasco, son tantos los hermanos que están afectados por la inundación, y tenemos la necesidad de borra nuestras diferencias, divisiones; tenemos que buscan lo que nos une y desechar lo que nos separa, hacer un solo frente común a la adversidad, sabemos que hay problemas.
Mientras estemos divididos se pueden hacer las mejores propuestas. Todo lo que sea para bien de nuestro pueblo es apoyado por la iglesia, desde nuestro campo como iglesia, que no es el campo político, económico ni técnico, pero nos unimos desde nuestra misión como iglesia para apoyar todo lo que sea necesario para nuestro pueblo", recalcó.
Villahermosa, Tabasco.- Vivimos en una sociedad "leprosa" con mucha marginación, pobreza, divisionismos y corrupción que dañan sobremanera al propio pueblo mexicano sumido en problemas y situaciones adversas, expresó el presbítero Denis Ochoa Vidal durante la homilía en el vigésimo octavo domingo del tiempo ordinario.
El evangelio de este domingo presenta a Jesús que cura a diez leprosos, de los cuales sólo uno, samaritano y por tanto extranjero, vuelve a darle las gracias. El Señor le dice: "Levántate, vete: tu fe te ha salvado". Esta página evangélica nos invita a una doble reflexión.
Ante todo, nos permite pensar en dos grados de curación: uno, más superficial, concierne al cuerpo; el otro, más profundo, afecta a lo más íntimo de la persona, a lo que la Biblia llama el "corazón", y desde allí se irradia a toda la existencia. La curación completa y radical es la "salvación". Incluso el lenguaje común, distinguiendo entre "salud" y "salvación", nos ayuda a comprender que la salvación es mucho más que la salud; en efecto, es una vida nueva, plena, definitiva.
Aludiendo al pasaje bíblico, Ochoa Vidal indicó que analizando este evangelio a la luz de la realidad actual, resulta que nuestra sociedad padece también de lepras, porque en la sociedad hay gente marginada, gente dividida, grupos enconchados que miran únicamente sus intereses particulares o grupos y eso es en todos los campos, llámese social, religioso, político.
"Creo que Jesús nos quiere curar de la lepra, por eso hay momentos como esta situación tan difícil que atraviesa Tabasco, son tantos los hermanos que están afectados por la inundación, y tenemos la necesidad de borra nuestras diferencias, divisiones; tenemos que buscan lo que nos une y desechar lo que nos separa, hacer un solo frente común a la adversidad, sabemos que hay problemas.
Mientras estemos divididos se pueden hacer las mejores propuestas. Todo lo que sea para bien de nuestro pueblo es apoyado por la iglesia, desde nuestro campo como iglesia, que no es el campo político, económico ni técnico, pero nos unimos desde nuestra misión como iglesia para apoyar todo lo que sea necesario para nuestro pueblo", recalcó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.